Tras votar en la mesa 48, Freixa, la sorpresa de la campaña, que formó parte del equipo de Joan Laporta, fue portavoz con Sandro Rosell y directivo con Josep Maria Bartomeu, ha comentado que ha realizado «una trayectoria muy ascendente» y la sensación que tiene es «de estar en una final».
«El voto útil está repartido entre Bartomeu y nosotros, pero hoy no es día de realizar valoraciones, simplemente de disfrutar la fiesta e invitar a todos a que vengan a votar», ha comentado Freixa, quien considera que ha sabido llegar a todo el mundo en esta campaña.
«Quien tenga que tomar una decisión, ha tenido los elementos suficientes para ello», ha indicado Freixa. El candidato ha reiterado que el triplete, que ha monopolizado el último presidente, «es sobre todo de los jugadores y de los socios, más que de la junta directiva».
Asegura que tiene las mismas sensaciones que en 2003, cuando formó parte del equipo de Laporta, ganador sorprendentemente de las elecciones ante Lluis Bassat.
«El socio sabes lo que nos estamos jugando: el futuro de seis años, el inmediato. Los socios del Barça siempre han sido responsables», ha comentado.
Freixa ha recordado que los cuatro candidatos han llegado a la final «muy justos» y ha alabado el trabajo de todos ellos. «Todos han hecho una gran campaña, ha sido un ejemplo para todos. Somos un club único para todos», ha indicado.
«El Barça se juega hoy el futuro inmediato, se ponen las bases del futuro. Estamos hablando de cómo hacer las cosas de ahora en adelante», ha insistido.
Freixa ha recordado que hoy «está en juego la felicidad de los barcelonistas», una cuestión que ha calificado como «un patrimonio emocional que nos afecta a todos, que estamos muy pendientes de lo que pasa en el barcelonismo».
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