Siete triples de Belinelli y 27 puntos de Gallinari hunden a España

España (20+25+18+35): Pau Gasol (34), Rudy (7), Rodríguez (4), Ribas (8) y Mirotic (13) -equipo inicial- Reyes (9), Hernangómez (6), Llull (9) y San Emeterio (8).

Italia (19+23+31+32): Belinelli (27), Gentile (13), Gallinari (29), Bargnani (18) y Cinciarini -equipo inicial-, Hackett, Aradori (11), Cusin (3) y Melli (4).

Árbitros: Borys Ryzhyk (UKR), Saso Petek (SLO) y Aare Halliko (EST). Cusin (min. 35), Bargnani (min.37) y San Emeterio (min.40) fueron eliminados por cinco personales.

Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada del grupo B disputado en el Berlín Arena ante unos 6.000 espectadores.

La selección española de baloncesto perdió ante la de Italia por 98-105 tras una genial actuación de Marco Belinelli (7/9 triples y 27 puntos) y Danilo Gallinari (29 puntos) que hicieron inútil la gran aportación de Pau Gasol, autor de 34 puntos.

Pau Gasol fue el centro de atención del partido en los primeros minutos, en defensa y en ataque, para España y para Italia. Los transalpinos comenzaron más entonados y suya fue la primera ventaja, 1-6 (min. 2,20), que Pau se encargó de neutralizar a base de tiros libres (5-6, min.3).

Pau (12 puntos) y Ribas, con dos triples, mantuvieron a España en el marcador, mientras que Gallinari (5) y Bargnani (10), en el primer cuarto, fueron los más acertados en una selección italiana que tuvo muy claro cerrarse en defensa sobre el pívot español y frenar cualquier opción de contra o transición de los españoles.

El 20-19 de final del primer cuarto, favorable a España, habla bien a las claras de la igualdad reinante en el partido.

No cambiaron mucho las cosas en el segundo periodo. Con la entrada de las segundas unidades a pista tanto España como Italia funcionaron un poco a rachas. El capitán Felipe Reyes cogió el testigo anotador y muy bien secundado por Guillermo Hernangómez pudieron mantener la paridad, 28-29 (min. 13.30).

Las defensas perdieron la batalla ante los ataques y las buenas acciones individuales eran difícil de frenar por ambos bandos. El marcador funcionó a impulsos y dos contras seguidas de Sergio Llull devolvieron a España a números azules, 41-38 (min.17).

Al descanso se llegó con un 45-42, las espadas en todo lo alto y con la selección española imponiéndose en ambos cuartos aunque por una muy exigua diferencia.

Tras el paso por vestuarios Marco Belinelli tomó los mandos del partido y con once puntos casi seguidos fue el máximo responsable de un parcial de 2-15 (min. 23.50) que puso el marcador en 47-57.

El equipo español atravesó por otra crisis de puntería y tampoco acertó a meter balones a los pívots en la pintura, mientras la diferencia italiana crecía como la espuma.

España consiguió frenar la sangría de puntos de Italia, pero no a un Belinelli en estado de gracia al que sus compañeros buscaban una y otra vez, 52-62 (min.24.30).

Rudy Fernández, con cinco puntos seguidos, consiguió, al menos por el momento, que la ventaja no se convirtiera en dramática. España se puso el mono de trabajo y con una defensa en zona intentó capear el temporal de la mejor manera posible, aunque dos errores al final del periodo y un nuevo triple de Belinelli, quien si no, devolvió la decena de puntos de ventaja a Italia, 63-73.

Los 17 puntos de Belinelli en este tercer cuarto fue una losa para España que no supo como atajar este problema.

Cinco puntos consecutivos de Fernando San Emeterio dieron un respiro a los españoles 68-75 (min.32), pero Belinelli volvió a aparecer y otro triple de Danilo Gallinari disparó la ventaja transalpina hasta un 68-81 (min.32.40) que puso las cosas muy cuesta arriba para la selección.

España no encontró la forma de frenar a los italianos y aunque lo intentó hasta el final, no consiguió rebajar la diferencia (81-93, min.37) y tener alguna opción de victoria. Al final, 98-105 y España que queda en una posición comprometida en el grupo.