El vicepresidente de la Federación Española de Fútbol y presidente de la Federación tinerfeña, Juan Padrón. | Efe

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El vicepresidente económico de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Juan Padrón, medió para favorecer que sociedades cercanas a la trama del presidente Ángel María Villar continuaran como proveedoras de material deportivo y llegaran a recibir del organismo 36 millones de euros.

El magistrado de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz detalla en el auto en el que envía a prisión al propio Padrón, al presidente Ángel María Villar y su hijo, que la Federación adquiría ropa deportiva a la sociedad Estudio 2000 (administrada por los hermanos Fermín y Vicente Bernad Vico, íntimos amigos de Padrón).

Debido a esta relación de amistad, la Federación siguió comprando el material deportivo a esta empresa pese a que había roto con la marca Puma. El acuerdo no fue ofertado a ninguna otra marca y el material que adquirieron, destinado a vestir a los árbitros y a las selecciones territoriales, «en muchos casos» quedó apilado sin llegar a darle uso.

Padrón, «arropado» por Villar, consiguió que Estudio 2000 fuera proveedora del material deportivo y ésta, a su vez, contrató con Tenerife Sports (propiedad de dos hijas de Padrón) consiguiendo así que parte de los fondos federativos pasaran a su patrimonio particular.

También se benefició de esta trama el cuarto detenido en el operativo, Ramón Hernández Baussou (presidente de la Federación Tinerfeña) ya que participaba en Tenerife Sports como director gerente. El juez Pedraz decretó para este último su ingreso en prisión eludible bajo el pago de una fianza de 100.000 euros.

De los informes emitidos por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se desprende que la sociedad administrada por los hermanos Bernad Vico recibió entre 2009 y 2016 pagos por parte de la RFEF por un importe total de 36.534.336 euros como consecuencia de dicho contrato de suministro de material deportivo.

El auto añade que la Federación podría haberse ahorrado 5,9 millones de euros si hubiera adquirido directamente las prendas a Distrisa, sociedad que comercializa la marca Pony. No obstante medió en la operativa Estudio 2000 que fue la que vendía finalmente las prendas a la Federación.

Pedraz concluye que Tenerife Sport es el medio que empleó Padrón para ocultar las presuntas comisiones cobradas y precisa que la relación de amistad entre este y los hermanos Bernad Vico es tal que estos destinaron cerca de un millón de euros para cancelar un préstamo hipotecario del vicepresidente económico de la Federación.