Aduriz observa a Keita en un momento del entrenamiento celebrado ayer en Son Bibiloni. | Monserrat

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El Real Mallorca ha decidido abrir expediente disciplinario a Aduriz y Keita por la pelea que ambos protagonizaron en los últimos minutos del partido que enfrentó al equipo balear frente al Málaga. Poco antes de finalizar el encuentro, ambos futbolistas se enzarzaron en una pelea pública de la cual ambos aseguraron ayer sentirse arrepentidos y pidieron disculpas a la afición. El club hizo oficial ayer la apertura de un expediente disciplinario a los dos jugadores por el cual serán «sancionados conforme a lo recogido en el régimen interno del club y que así se les comunicará en tiempo y forma en el ámbito privado».

Aduriz hizo lo más difícil, es decir, dar la cara ante los periodistas, mientras que Keita no habló y se limitó a expresar su arrepentimiento a través de un comunicado colgado en la página web oficial del club. Alegando que «apenas habla castellano», Keita dejó a Aduriz solo y el jugador vasco explicó ante los medios que su comportamiento el pasado domingo había estado «fuera de lugar». «Sobre todo quiero pedir disculpas. Ya lo he hecho internamente con todos mis compañeros y con Keita especialmente. No debió de pasar lo que todos pudisteis ver y si pasó fue fruto de los nervios», comentó el jugador vasco.

Aduriz reconoció que este tipo de actuaciones «no se debería ver nunca en un campo de fútbol y además no es el reflejo de este vestuario ni de la relación con Keita. Me equivoqué, asumo la responsabilidad y sé que no se puede hacer lo que hice. A todo el mallorquinismo y al club les pido disculpas por un comportamiento fuera de lugar», comentó el jugador del Mallorca.

Aduriz dijo, respecto a la sanción que le impondrá el club, que «acaterá la decisión y lo que decidan estará bien decidido. Reconozco que me equivoqué mucho y no volverá a suceder», manifestó Aduriz.

El delantero en ningún momento trató de justificar su acción, ni tan siquiera por las ansias que tenía tanto él como el equipo de ganar el partido. «Nada justifica mi acción, por mucha ganas que tengas de ganar eso es la manera contraria de hacer las cosas bien para poder lograr la victoria. Es injustificable», comentó.

Aduriz señaló que su acción fue «un acto puntual, perdí los nervios y ahora lo que queremos todos es centrarnos en los cuatro partidos que restan y que ese borrón se quede en un error mío y ya está», comentó. «Soy el que más falla de todos y no puedo recriminar nada a nadie. Cada uno tiene su forma de actuar y yo no soy absolutamente nadie para recriminar nada a nadie porque repito que soy el que más errores comete», manifestó Aduriz.

El delantero insistió en la idea de que la pelea nunca debió producirse señalando que «confío que a partir del miércoles hablemos de fútbol y todo quede en una pequeña anécdota. La tensión se va acumulando y son cosas que ocurren en ocasiones dentro de un campo de fútbol. Los que habéis podido jugar o vivir este tipo de situaciones lo entenderéis, pero insisto en que nunca debía haber sucedido esto y los nervios me pasaron una mala jugada», manifestó el punta guipuzcoano. «Somos humanos, cometemos errores y el tema está solucionado», sentenció Aduriz.

Por su parte Keita decidió -él o el club- no salir a dar la cara como hizo Aritz y se escudó en un frío comunicado. Al delantero vasco se le vio ayer arrepentido, apenado y triste por lo ocurrido. A Keita hay que interpretarlo en un par de líneas. «Pido disculpas a la afición y a mis compañeros, quiero decir que fue producto de los nervios de un final de partido muy tenso. Todos queremos ganar, estábamos nerviosos. No tengo ningún problema con Aritz, es mi compañero. Fue algo que pasó, he hablado con él y está todo aclarado. Ahora miramos todos a Bilbao, pido que todo el mundo nos apoye en nuestro objetivo de conseguir clasificarnos para la Champions». Así de claro. Así de frío.