Manzano, en el centro de la imagen, durante el último encuentro del Mallorca en Son Moix. | M. CARRERAS

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Gregorio Manzano prefiere aparcar el jogo bonito a desconectar la calculadora. El técnico del Mallorca, empeñado en que su equipo mantenga la calma tras la última victoria, recuerda que la única prioridad ahora es dinamizar la cuenta corriente del equipo y que, llegados a este punto, poco importa el camino elegido para llegar a la victoria. «Hay que completar esta semana con esos seis puntos», resalta el jienense. «Hemos aprendido, o hemos sacado la lectura, de que los seis o siete equipos que estamos allí abajo, ninguno va a jugar bonito. «Hay que ser muy práctico y saber que nos estamos jugando tres puntos de una gran moral, dar un gran paso hacia delante. Y hay que conseguirlos como sea. Si es con buen juego, que es como yo deseo, perfecto. Pero si es con sufrimiento, pues perfecto también», sentencia.

Frenar la euforia

El preparador andaluz no quiere que su equipo se pierda en rodeos innecesarios y, sobre todo, que no crezca la euforia en torno al grupo por haber abandonado al Celta por el camino. «Ojalá cuando termine la jornada incluso podamos decir que hemos salido de la zona peligrosa, pero no hay nada definitivo. Hay que seguir hacia adelante en estas siete jornadas donde todas van a ser, no voy a decir dramáticas, pero sí auténticas finales en las que, como se comprobó el lunes, habrá muchos nervios. Esta vez nos enfrentamos a un rival muy distinto, pero nos tiene que servir como el preámbulo de lo que queremos, que es llegar a esa barrera de los 30 puntos».

Manzano cree, sobre todo, que el Mallorca debe administrar correctamente la tensión y no caer en la impotencia en plena batalla. «No hay que desesperarse», recomienda. «El gol puede llegar en cualquier instante, no es una cuestión en la que nos pueda afecrar esa ansiedad. En el futbol, hasta que el árbitro no pita, se puede ganar y se puede perder. Por eso el control del partido es importante, como también lo es el control emocional dentro del campo. Hay que seguir en esta línea, manteniendo la portería a cero y siendo mucho más consistentes en defensa», argumenta el preparador rojillo.

Según el propio Manzano, que admitió que no haber recibido goles ante el Celta no significa haber trabajado del todo de manera correcta, el rival de turno tendrá mucho que decir en el partido de esta noche. «Debemos ser mucho más consistentes, fuertes y agresivos, porque enfrente va a haber un equipo que es muy agresivo, muy dinámico y muy vertical. El Rayo está haciendo una temporada muy desenfadada futbolísticamente hablando y con unos muy buenos resultados. Y eso hay que combatirlo con buenos argumentos», destaca.

Más allá de los detalles concretos del encuentro, Manzano admite que ha abordado la amenaza de sanción a la que se enfrenta Gio en el caso de que vea una nueva tarjeta amarilla. «Tengo su palabra de que no le amonestarán, con eso me basta. Y si es así, le arranco la cabeza», bromeaba. Además, confiesa que le ha dado un toque de atención a Luna por su salidas de tono con algunos aficionados en Twitter: «Antes situaciones así el entrenador debe hacerle ver a los jugadores que eso no es correcto y que no conduce a nada. No podemos malgastar energía así».

Por último, Gregorio Manzano espera seguir ampliando la comunión con la grada: «Esperamos su apoyo y entre todos juntos vamos a sacar esto adelante, seguro».