El jugador del Real Mallorca Aleix Febas gesticula durante el partido que enfrentó a los bermellones y al Valencia en Mestalla. | Carla Cortés

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El primer gran test de la temporada para el Real Mallorca llega a partir de este domingo, día en el que empieza un tramo de la Liga con mucha curvas. A las 12 del mediodía el equipo de Vicente Moreno abrirá una semana de tres partidos, un examen de altura para un equipo todavía en construcción y que requiere de puntos para dar un primer salto de calidad.

Getafe este domingo, Atlético (miércoles 25) y Vitoria (domingo 29). Casi un partido cada dos días. Un primer Tourmalet que seguirá posteriormente con el Espanyol y se prolongará con el choque del Real Madrid el próximo sábado 19 de octubre a las 21:00 horas.

Pero por ahora Vicente Moreno tiene suficiente con preparar el partido contra el Getafe, un equipo que en estos momentos está peor que los mallorquinistas con solo tres puntos. Si el equipo balear requiere de una nueva victoria para endulzar su situación, el conjunto de Bordalás tiene también las urgencias lógicas de un equipo que ha empezado mal y que todavía ni tan siquiera ha inaugurado su casillero de victorias.

Y las urgencias se citan en una semana en las que abre su participación en la Europa League ante el Trabzonspor Kulübü, partido que se disputa el jueves. No es el conjunto azulón un equipo acostumbrado a combinar las emociones europeas con el campeonato doméstico y hay que ver cómo reaccionará el domingo cuando se sitúe frente a él un Mallorca más descansado y que habrá podido planificar la semana solo pensando en el choque liguero. En estos momentos la puntuación y la clasificación es prácticamente simbólica, pero lo cierto es que durante estos últimos años la afición se acostumbró a ver al equipo arriba desde el minuto cero y ahora en Primera esa situación es difícil que se pueda volver a reproducir.

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Aunque la historia es diferente, los puntos tienen la misma importancia y hay que sumar de tres en tres para evitar que esta sensación de inquietud se convierta en una presión añadida.

Una vez resuelto el partido en el Alfonso Pérez, el miércoles siguiente, 25 de octubre y a una hora muy mala (19:00 h) el equipo balear recibirá en Son Moix al Atlético de Madrid. Un horario todavía de trabajo para muchos aficionados y prohibitivo para un gran número de seguidores de la Part Forana que además de los horarios laborales, tienen por delante un camino no siempre fácil a la hora de llegar a palma.

El Atlético ya se ha situado en la zona alta y ya ha sido incluso líder de la categoría. Será el primero de los ‘grandes' en visitar Palma en esta difícil semana de tres partidos. El domingo 29 de este mes se cerrará esta primera fase de alta montaña con el choque en Mendizorroza ante el Deportivo Alavés.

No ha conseguido tampoco el conjunto de Asier Garitano ser tan temible como la temporada pasada, al menos por ahora y tras ganar al Levante en la primera jornada, no ha vuelto a saborear el triunfo en los tres siguientes encuentros.

Entrados ya en el mes de octubre el primero de los encuentros será frente al Espanyol en un choque se disputará al mediodía. A día de hoy el equipo blanquiazul está despertando más dudas que certezas, con solo un triunfo en los cuatro encuentros que ha disputado. El fin de semana siguiente llegará un nuevo descanso en la competición por culpa de los encuentros internacionales. El Madrid quedará desmantelado por el llamado virus FIFA justo la semana en la que debe visitar Son Moix. A día de hoy no se sabe cómo estará ni el Mallorca ni el Madrid, pero lo cierto es que la llegada del equipo de Zidane siempre está marcada en rojo. Agárrense porque vienen curvas.
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