Luis García ayuda a incorporarse a Kang In Lee en el partido contra el Levante. | Miquel Àngel Llabrés

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Cerrado ya el segundo parentesis de este principio de temporada, la plantilla del Mallorca vuelve a la carga. El equipo balear, todavía sin sus cinco internacionales (Lago Junior, Baba, Fer Niño, Dominik Greif y Hoppe), volvía ayer a los entrenamientos para recuperar el hilo de la Primera División y empezar a preparar lo que resta de mes, en el que deberá recorrer un tramo de curvas cerradas. Sin las prisas de hace unas semanas y desde una posición relativamente cómoda, a la escuadra que dirige Luis García Plaza le esperan cuatro compromisos en las próximas tres semanas, la mayoría fuera de Son Moix, en los que el grado de exigencia se irá disparando.

El Mallorca volverá a competir el sábado tras dos semanas sin hacerlo y el primer reto del equipo será mantener el nivel mostrado en su última función frente al Levante, algo que ya le costó tras el parón de septiembre. En aquella ocasión el lapsus para atender a los compromisos de las selecciones nacionales cercenó el buen momento del grupo, que cuajó en Bilbao una actuación llena de grises y encajó la primera derrota de la temporada (2-0).

Para empezar, al Mallorca le toca adentrarse otra vez en territorio vasco, en esta ocasión para enfrentarse a una Real Sociedad instalada en la tercera posición aunque con los mismos puntos que Madrid y Atlético (sábado, 21.00 horas).

Prueba

La siguiente parada también estará lejos de Palma. El Mallorca enganchará dos partidos consecutivos como visitante y tras pasar por Anoeta lo hará por Mestalla (sábado 23, 14.00 horas) para enfrentarse a un Valencia que pese a ser el club con el límite salarial más bajo de Primera y haber perdido algo de altura también ha ganado en peso y personalidad con la llegada de Bordalás al banquillo. Será una buena ocasión para comprobar la dureza de los bermellones a domicilio en otro tramo accidentado, ya que sin apenas descanso recibirá al Sevilla en Palma en una jornada intersemanal y viajará a Cádiz para cerrar el mes y situarse ante otro parón, que llegará después del primer partido de noviembre contra el Elche.