Los galones de Grenier

Esa inactividad fue la que le acercó al Mallorca. Pablo Ortells, director deportivo de la SAD, puso sus ojos sobre el futbolista y vio en él, el potencial sustituto de Iñigo Ruiz de Galarreta tras su lesión, pero la salida de Salva Sevilla le ha abierto la puerta para ser clave en el segundo año del equipo en Primera División. Sin mucho protagonismo durante el final de la temporada pasada con, únicamente, minutos residuales, dejó destellos de ser un jugador diferente, con una mentalidad especial y con un toque de la pelota excelso. Con poco tiempo, se encargó de encarrilar la permanencia con el 0-2 en El Sadar y abriendo la veda de una futurible historia.

Grenier se puso el objetivo de ponerse a tono para coger un rol protagonista en los esquemas de Javier Aguirre. Lo ha hecho y ha cogido los galones de guiar al equipo en el centro del campo. Con la capacidad de dibujar con sus pies pases inteligibles y con una visión excelente, oposita a ser el jugador franquicia de un equipo que ha quedado huérfano de faro tras la salida de Salva Sevilla rumbo a Vitoria.