Los jugadores del Athletic Club y su técnico Ernesto Valverde -arriba a la derecha- celebran el título de Copa del Rey conquistado este sábado al superar al Real Mallorca en la final disputada en el estadio de La Cartuja en Sevilla. | Marcelo del Pozo

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Ernesto Valverde se mostraba exultante tras lograr para el Athletic Club de Bilbao su título más perseguido en los últimos años. «Este título no tiene comparación con ningún otro y así lo siento yo», expresó en rueda de prensa.

«Al principio hemos sufrido porque buscaban los balones largos con mucha disputa. Nosotros sabíamos que si el partido era largo íbamos a tener nuestras opciones y en la prórroga he visto que podíamos ganar», analizó el técnico del conjunto vasco. Como hizo Aguirre, Valverde también apostó por su portero suplente. «Tenemos la suerte de tener a Unai Simón y también a Julen (Agirrezabala), que a pesar de su juventud ya ha vivido encuentros importantes. Valverde no ha querido pensar en estos días en celebraciones. «En Grecia cuando ganábamos un título me iba a un bar a comer un gyros y a beber una cerveza a un sitio tranquilo. La verdad que no sé lo que haré».

Nico Williams, elegido el mejor jugador del partido, fue uno de los jugadores que mayor liberación sintió cuando Berenguer materializaba el penalti decisivo. «Yo fallé unas ocasiones muy claras en las semifinales del año pasado (contra Osasuna) y fue muy duro. Me alegró además mucho por la afición porque se lo merece todo. Es un título muy perseguido por el club porque hacía 40 años que no la lográbamos y la verdad que la sensación es increíble». El delantero nacido en Pamplona también expresó su deseo de que los aficionados «disfruten por todo lo alto» cuando la gabarra vuelva a surcar el viernes las aguas del Nervión.

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El capitán rojiblanco, Iker Muniain, estaba exultante. «Ha sido increíble y hemos pasado muchos momentos difíciles. 40 años sin la Copa son muchos, pero ya no la vamos a soltar nunca más».
Otro jugador del Athletic de Bilbao que no podía ocultar su emoción era Oscar De Marcos, el segundo capitán del equipo. «Es un sueño. Me acuerdo de mi familia, mis amigos y de los excompañeros que he tenido y que no pudieron ganar este título. Recientemente he hablando con Gurpegi y me acuerdo mucho de él y de otros».

Raúl García, con el rostro más sereno «dijo que había que celebrar las cosas bonitas».

Por su parte, el presidente del Athletic de Bilbao, Jon Uriarte calificó de «impresionante el día. Ha sido un encuentro muy igualado, que se nos ha puesto cuesta arriba y hemos conseguido empatar ante un equipo que defiende muy bien. No hemos podido ganar en los 90 minutos y en la prórroga, pero en los penaltis se ha impuesto la veteranía de nuestros jugadores». Uriarte se mostró muy contento por leyendas como José Ángel Iríbar «al que me he abrazado, ambos emocionados».
El máximo mandatario rojiblanco se mostró muy ilusionado con la celebración en la gabarra. «Pero no hay que olvidar que tenemos el domingo un encuentro muy importante contra el Villarreal porque queremos jugar la Champions League en la temporada que viene.