Nadal volció ayer al trabajo en el centr de tenis de Manacor. | M. À. Cañellas

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Tras un paréntesis de dos semanas, Rafael Nadal desempolva la raqueta y ya prepara su regreso. El gimnasio queda relegado y la pista cubierta del centro de tenis de Manacor se convierte de nuevo en su hábitat natural. Australia y la rotura fibrilar en el tendón del cuádriceps ya ha quedado atrás, pero las buenas sensaciones acumuladas en Melbourne le impulsan hacia Indian Wells. Vuelve a sonreír y mantiene intacta su ilusión.

"La duda que planea tras sus lesiones es: ¿Qué le pasa a Nadal?
"Creo que me hago mayor (risas). Hablando en serio es cierto que desde el marzo pasado he tenido más problemas de lo esperado y tener continuidad es vital en cualquier ámbito de la vida. Lesionarme a mitad de año me hizo daño. Cuando volví a jugar bien fue la abdominal y después vinieron los torneos de pista cubierta que siempre han sido los más difíciles para mí. Se unió todo lo negativo. Ahora sólo he tenido la mala suerte de una roturita. Nunca es un buen momenpara un lesión, pero menos en un Grand Slam y jugando bien.

"¿Condicionará el físico su preparación o su estilo de juego?
"No. Al principio de la temporada he estado jugando de la forma adecuada, muy agresivo y con un ritmo muy alto. He jugado contra los mejores y, así como al final del año pasado no estaba preparado para ganar estos partidos, esta vez tuve oportunidades en todos ellos.

"¿Tiene la sensación de empezar otra vez de cero?
"Ni mucho menos. Me sentía capacitado para ganar los partidos de principio de año y no quería estar casi un mes y medio sin jugar. Estoy preparado para volver a ganar. Lo estuve porque trabajé mucho en la pretemporada para estar fuerte de piernas y evitar todo esto, pero esta vez tenía que pasar esto y no es agradable. No es ni mucho menos un problema como el del año pasado y no será tan complicado recuperar el nivel. Sólo ha sido una pequeña rotura, algo que me ha pasado muy pocas veces. Tuve una en 2003 en San Juan de Luz y el año pasado en Estados Unidos.

"¿Trabaja el saque y trata de ser más agresivo para castigarse menos?
"No es cuestión de castigarse menos, se trata de jugar mejor.

"¿Volverá a ser el mismo?
"Siendo realistas estoy el número 3 y no sé dónde más se puede estar ¿volver o no? Se puede ganar más de lo que lo he hecho últimamente, pero tengo 36 títulos y 23 años. El que jugó en Abu Dadi, Doha y Australia era el mismo que ganó todo lo que ha ganado. Ahora sólo he tenido un pequeño parón. Sólo es una cuestión de tiempo y tranquilidad de todos, del público, de los medios y mía, porque soy el primero que quiere más.

"¿Parar le permite valorar más lo logrado o apreciar la dificultad?
"Todo lo vas valorando y valoras la dificultad. Me sirve para estar más orgulloso de mi carrera porque nunca hubiera imaginado ganar lo que he ganado. Nos olvidamos de que tengo 23 años. Llevo tantos que parece que soy mayor, pero me quedan muchos para intentar estar arriba. Estoy contento con lo que se ha hecho hasta ahora, tengo la ambición para seguir adelante y la tranquilidad de que lo conseguido está en la estantería. Es mi octavo año en el circuito y he estado cinco en los que sólo he bajado un par de semanas del número dos. A veces las cosas van tan rápido que no ves la dificultad, pero es difícil estar todas estas semanas sin fallar y soy consciente de que con tranquilidad y trabajando todo llega.
"Ha recuperado el número 3, pero usted siempre le resta importancia a su posición en el ranking.
"El ranking te lo da jugar bien. No es quitarle importancia porque es un tema importante, pero no prioritario. Lo importante es ir a un torneo y tener la sensación de poder ganar. Me sentía preparado en los torneos que he estado y con esta sensación el ranking viene solo.