La investigación se inició el pasado día 20 de octubre, a partir de la denuncia de un vecino de Fuengirola que comunicó a los agentes un robo con fuerza en su residencia, supuestamente perpetrado ocho días antes. El denunciante informó de unos daños en la puerta de su piso y la sustracción de un reloj valorado en 450 euros, han informado desde la Comisaría.
Continuando con las indagaciones, los investigadores comprobaron que en la fecha del presunto robo, una patrulla de Seguridad Ciudadana había acudido a ese mismo domicilio alertada por una vecina que había encontrado la puerta de una vivienda entreabierta, comprobándose como en su interior estaba su morador ebrio, el cual afirmaba que todo estaba en orden y que la puerta de su casa presentaba daños con anterioridad.
Las diligencias practicadas vinieron a confirmar que el morador del inmueble llegó embriagado aquella noche, abrió la puerta del portal, olvidando las llaves en la cerradura, y, a continuación, supuestamente forzó la puerta de su propia vivienda.
Pasados ocho días, sin recordar probablemente que una patrulla había acudido a la vivienda, el investigado se dirigió a la Comisaría para denunciar un supuesto robo en su domicilio y, posteriormente, presentó un parte por el incidente a la compañía del seguro de hogar.
Finalmente, el sospechoso acabó confesando que todo se trataba de una farsa y que había denunciado los hechos al objeto de obtener una indemnización por parte de su aseguradora. Además, expuso que su reloj lo había extraviado en las fiestas de la localidad.
El investigado, con antecedentes por hechos de la misma naturaleza, ha sido arrestado por su presunta implicación en los delitos de simulación de delito y estafa.
Un segundo detenido por simulación, en otro hecho independiente
Por otro lado, otro hombre, de 33 años, ha sido detenido días atrás, también en Fuengirola, por fingir supuestamente un asalto en su furgoneta de reparto.
El investigado, que trabaja como asalariado en una empresa de la zona, había denunciado en comisaría ser víctima de un robo con violencia por parte de un hombre que, tras amenazarlo con un objeto punzante cuando regresaba al vehículo de cobrar una factura, le arrebató 450 euros.
Tras la práctica de diligencias de investigación, los agentes confirmaron que el denunciante había mentido en su exposición de los hechos. En dependencias policiales, esta persona reconoció que había fingido el robo para justificar un descuadre en la caja de la que era responsable en su empresa.
Desde la Comisaría Provincial de Málaga han recordado que denunciar hechos inexistentes «tiene graves consecuencias». De hecho han precisado que fingir ser víctima de un robo al objeto de cobrar una indemnización «constituye un delito».
Asimismo, han indicado que denunciar un robo inventado «supone la utilización de numerosos recursos humanos y materiales para la investigación de unos hechos que no sucedieron y que restan esa dedicación al seguimiento de los ilícitos efectivamente cometidos».
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