En el acto de presentación de la campaña, en el que han participado el director de Cáritas Diocesana de Zaragoza, Carlos Gómez, y la secretaria general, África Navarro, se ha puesto sobre la mesa la complicada realidad a la que se enfrentan muchos, pero con un mensaje de esperanza.
La pandemia y la inflación han acelerado el empeoramiento de las condiciones de pobreza y exclusión de aquellos que ya atravesaban una difícil posición. «La pandemia no es que haya aumentado el número de personas en situación de pobreza, sino que las que ya estaban en esta situación de exclusión han empeorado todavía más sus condiciones de vida», ha manifestado Navarro.
Entre las dificultades a las que muchos se enfrentan se encuentran los bajos salarios, la escasez de vivienda accesible para quienes cuentan con menos recursos, así como los problemas de salud mental y la soledad, entre otros.
En Aragón, según las primeras observaciones realizadas por Cáritas en cuanto a la intervención realizada con familias en estos últimos meses, la vivienda aparece como la principal variable que genera exclusión social. «Se ha convertido no solo en un bien de primera necesidad, sino en un lujo», ha incidido Gómez.
Esta situación tiene una repercusión mayor en los jóvenes de entre 18 y 35 años, quienes cuentan con más riesgo de caer en situaciones de exclusión que las personas con más de 69 años. Según el informe de FOESSA, el nivel de exclusión es del 33% para los primeros, frente al 9% en los mayores.
La realidad actual presenta dos situaciones de exclusión residencial: por un lado, la vivienda insegura (vivir temporalmente sin contrato arrendatario, bajo la amenaza de violencia o con notificación de desahucio, entre otros); y la vivienda inadecuada, es decir, aquella que no reúne las condiciones adecuadas para la habitabilidad, con hacinamiento o sin acceso de suministros.
Para ayudar a hacer frente a esta situación, Cáritas Zaragoza ha destinado un total de 767.227,72 euros para cubrir gastos relacionados con la vivienda. Dicha ayuda se suma a las que ya ofrecen desde la institución para alimentación y gastos sanitarios, entre otros.
Un mensaje de esperanza
Después de trazar la realidad actual, Cáritas Zaragoza lanza un mensaje de esperanza para esta Navidad: 'Solo el amor lo ilumina todo'. Y es que, ante la difícil situación que algunos viven, son muchos de los que se muestran activos por salir de ella. Según los datos del mencionado informe FOESSA, en siete de cada diez hogares la predisposición por querer salir de las situaciones de exclusión es alta.
Desde Cáritas Zaragoza han expuesto algunos casos de superación que han presenciado. Uno de ellos ha sido el de Luis, quien contaba con un perfil profesional con escasas competencias digitales y un nivel de estudios básico, que dificultaba su incorporación al mundo laboral. Después de participar en el programa empleo de la Fundación para la Inclusión Social de Cáritas Zaragoza, mejoró sus competencias personales y laborales, encontrando trabajo como operario. Ahora, Luis trabaja como electricista, siendo un buen ejemplo de esperanza.
Para iluminar las sombras de esta situación socioeconómica compleja durante esta Navidad, Cáritas Zaragoza propone el amor como herramienta para llenar los hogares de humanidad. Un amor que convoca a la necesidad de cuidar y ser cuidados, de vivir disfrutando de un bien común y colectivo con el pleno acceso de todas las personas a los derechos humanos y fundamentales para lograr unas condiciones de vida dignas.
Según han explicado, este es un amor de todas las personas y empresas que, durante todo el año, han colaborado con la entidad, y han querido agradecer el compromiso voluntario de 931 personas y la generosidad de las 6.175 personas socias que permiten desarrollar cada día los programas y proyectos de Cáritas en la Diócesis de Zaragoza.
Este jueves, 15 de diciembre, la entidad se reunirá a las seis de la tarde con todas ellas, en el acto de campaña institucional que tendrá lugar en el Edificio del Grupo San Valero, situado en la plaza Santa Cruz. Allí se profundizará en la campaña a través de una mesa de testimonios en torno a un ejemplo cercano, que pretende mostrar cómo es posible unirse por el bien común, a pesar de las diferencias.
Se trata de la iniciativa ESENCIALES a la que se ha sumado Cáritas Zaragoza, que tiene como objetivo posibilitar el acceso a los derechos fundamentales a 500.000 personas que viven en situación administrativa irregular en España.
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