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Sindicatos han cifrado en un 60% el seguimiento de la huelga convocada por ELA, LAB y Steilas en la educación pública en contra del borrador del anteproyecto de la Ley vasca de Educación y han asegurado que se seguirán movilizando para impulsar los «cambios necesarios» para «lograr un sistema educativo público, euskaldun y propio».

Este paro se produce tras el desarrollado el pasado 30 de noviembre por estos mismos sindicatos y, en esta ocasión, las centrales sindicales han realizado esta mañana en Vitoria una manifestación con la participación, según han apuntado, de miles de personas. Para las seis de esta tarde están previstas movilizaciones en las tres capitales vascas.

Según han explicado, la huelga ha tenido especial incidencia en el Consorcio Haurreskolak y en Educación Infantil y Primaria. Los sindicatos han señalado que el paro, desarrollado bajo el lema, «Publikoa, euskalduna eta propioa helburu», ha tenido «un seguimiento muy amplio».

Las centrales sindicales han señalado que, al igual que en la jornada de huelga del 30 de noviembre, son más de 30.000 los trabajadores llamados a la huelga en la enseñanza pública no universitaria de Euskadi: docentes, educadoras y personal de gestión del Consorcio Haurreskolak, personal de educación especial de las escuelas públicas y personal de cocina y limpieza del departamento de educación.

Según han precisado, de media, el 60% de la plantilla se ha sumado a la huelga, aunque han indicado que en Educación Infantil y Primaria el seguimiento ha sido «notablemente mayor».

En el transcurso de la marcha, los asistentes han pasado delante del Parlamento y han aprovechado para decir al Gobierno vasco «no al anteproyecto de Ley de Educación que han hecho público».

Asimismo, han reclamado incidir en la Ley de Educación y en los cambios del sistema educativo porque será «legitima si es construida con los trabajadores».

Movilizaciones

Además, han asegurado que se seguirán movilizando para impulsar los «cambios necesarios» para «lograr un sistema educativo público, euskaldun y propio». «No necesitamos leyes, decretos o órdenes para perpetuar el sistema actual, debemos sentar las bases para superar el actual modelo dual y tener en cuenta las condiciones laborales y los puestos de trabajo de los trabajadores y las trabajadoras», han indicado.

Según han apuntado, una vez más ha quedado claro que el borrador del anteproyecto de ley de educación «no satisface al personal ni pone en vías de superación el actual modelo educativo dual». Por tanto, han manifestado que seguirán "luchando desde las escuelas y en la calle
para conseguir una ley que debería recorrer el camino hacia una red pública única, euskaldun y propia".

Por último, han recordado que sus reivindicaciones son una Ley de Educación que «tenga como eje la escuela pública y que haga frente a la segregación y garantice la cohesión social, que establezca un marco y una normativa general y consensuada para la publificación».

«Queremos una Ley de Educación propia, que prevea inversiones y recursos suficientes, que ponga el euskera en el centro, una Ley con obligaciones y mecanismos de control concretos, que garantice el empleo y las condiciones laborales adecuadas de todas las personas trabajadoras que formamos el sistema educativo. Queremos una Ley de Educación al margen de los intereses de los mercados y alejada del ámbito de negocio de las empresas privadas y una ley participativa que tenga en cuenta a los trabajadores», han resumido.

Los sindicatos han señalado que, en caso de que en el anteproyecto definitivo no se recogieran las reivindicaciones sindicales, valorarán las huelgas y movilizaciones realizadas y, durante la futura tramitación parlamentaria, «definirán la siguiente dinámica de movilizaciones».