Archivo - Monasterio de Villanueva de Sijena (Huesca). | Europa Press - EUROPA PRESS - Archivo

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El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha admitido su competencia para enjuiciar al exconseller de Cultura Lluís Puig por presunta desobediencia a raíz de la denuncia del Ayuntamiento de Villanueva de Sijena por la entrega de las obras de arte del Museu de Lleida, y ha remitido la causa del exconseller de Cultura Santi Vila a un juzgado de Barcelona.

En un auto consultado este lunes por Europa Press, la Sala explica que Vila fue notificado para trasladar al Monasterio de Sijena una serie de bienes artísticos --que se encontraban una parte en el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) y otra en el Museu de Lleida--, y que trasladó los bienes del MNAC pero no las 44 piezas del museo leridano.

Así pues, fue requerido para entregarlos pero --según el fiscal-- se negó y, posteriormente, se notificó a Puig, que acababa de suceder a Vila al frente de la Conselleria, sin que entregara los bienes en el «corto tiempo en que ejerció su cargo».

El Ministerio Fiscal y la acusación particular consideran que los hechos que se imputan a Puig y Vila son «hechos conexos», y justifican que se juzgue a los dos exconsellers juntos pero, sin embargo, el tribunal ha optado por separar las causas.

En este sentido, la acusación particular argumentó que «ambos acusados desobedecieron la misma sentencia judicial y actuaron en el mismo contexto generado por el ambiente subversivo del 'procés' catalán», ya que ellos fueron consellers entre 2016 y 2017.

Vila ve "posible el enjuiciamiento separado"

Por su parte, ante la alegación de la defensa de Puig, que se somete al criterio de la Sala, la defensa de Vila considera que, «si bien existe cierto grado de conexidad entre ambas conductas, en este caso es perfectamente posible el enjuiciamiento separado sin que por ello se vea afectada la continencia de la causa».

«No existen en este caso resoluciones o decisiones colegiadas ni tampoco actuaciones conjuntas por parte de los dos acusados, sino solo actuaciones individuales que se produjeron con ocasión en el curso de una sucesión temporal en el cargo de conseller de Cultura», asegura la defensa.

Ante estos indicios, la Sala sostiene que «no suponen una conexidad inescindible», por lo que no procede al TSJC asumir la competencia para conocer la conducta atribuida por las acusaciones de Vila.