Los depósitos metálicos de Inquinosa quedarán desmantelados esta semana, una actuación con 60.000 euros de inversión

La semana pasada se inició el desmantelamiento de los cinco depósitos metálicos de la antigua fábrica, de entre 6,5 y 10 metros de altura. Cuatro de ellos, los de 'cracking', tenían como uso el depósito de residuos para su tratamiento durante los últimos años de funcionamiento de la factoría. El quinto depósito se utilizaba como tanque de agua para incendios.

Ya ha finalizado el desmantelamiento de los dos depósitos de 'cracking' de la plataforma inferior, y se prevé que los tres depósitos de la plataforma superior se terminen por desmontar esta misma semana, según ha informado el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente.

En los últimos meses, tambien se llevan a cabo diferentes actuaciones preparatorias previas al inicio de las obras del desmantelamiento de Inquinosa, que se iniciará este mismo año. Entre ellas, se encuentra la salida de los residuos peligrosos que quedaban almacenados en el interior de los edificios, que concluyó a finales de 2022, así como la construcción del nuevo acceso a la antigua fábrica, necesario para la realización de los futuros trabajos de desmantelamiento, constituyendo un acceso alternativo e independiente al actual vial privado, cuyas obras acabarán en las próximas semanas.

Igualmente, la ejecución del nuevo contrato de seguimiento hidrogeológico de Inquinosa, que tiene como objetivos el seguimiento continuo y sistemático del acuífero, y la definición del modelo conceptual detallado del emplazamiento, necesarios para establecer la estrategia para la futura descontaminación del mismo.

La empresa Industrias Químicas del Noroeste, S.A. (INQUINOSA) inició su actividad en el año 1975 finalizando la producción de lindano en 1989 y su comercialización en 1992. Dos años más tarde la actividad cesó de forma definitiva, quedando la fábrica en estado de abandono.