El Gobierno andaluz ha manifestado este lunes en el Senado que la Ley de Amnistía es un «retroceso en la calidad de nuestra democracia, en la igualdad entre españoles y en la credibilidad de las instituciones», fruto del «entreguismo» del presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, a los independentistas catalanes. «Es plenamente inconstitucional y deja desprotegido el estado autonómico al sentar un precedente muy peligroso para su propia supervivencia», ha apuntado.
Así se ha pronunciado el consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, durante su intervención en la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado, en Madrid.
Ha indicado que España es el «proyecto común de los españoles y desde las comunidades autónomas tenemos no solo la legitimidad, sino también la responsabilidad institucional y la obligación legal y moral de defender a los españoles que representamos». Para Sanz, la Ley de Amnistía supone la «vulneración más grave producida en cuatro décadas del principio de solidaridad recogido en el artículo 2 de la Constitución y no puede concebirse atentado más grave contra la solidaridad que un intento de secesión».
Para Sanz, esa ley se «opone a principios esenciales del estado de derecho, y quebranta el principio de igualdad, la reserva de jurisdicción, el derecho a la tutela judicial efectiva y la seguridad jurídica». Ha añadido que se produce también una «flagrante violación de la igualdad en lo referido al delito de malversación de caudales públicos, porque al detraerse fondos públicos de forma ilícita se afecta a la Hacienda única del Estado de la que se financian todas las autonomías».
Tras apuntar que la amnistía solo podría ser incluida en el ordenamiento jurídico mediante una reforma de la Constitución, ha manifestado que si se lleva a cabo, «se produciría un golpe muy duro para el estado constitucional»: «Desde un punto de vista político porque el efecto de la ley es la deslegitimación del Estado, de su derecho y de sus instituciones y desde el punto de vista jurídico porque debilita la fuerza vinculante de los principios del Estado de Derecho y de la Constitución».
Para Antonio Sanz, «no puede concebirse atentado más grave contra la solidaridad que un intento de secesión, de destrucción de la unidad territorial del Estado para suprimir la vigencia de la Constitución en Cataluña». Ha puesto el acento en que dicha amnistía se otorga «sin que los beneficiarios hayan mostrado ningún tipo de arrepentimiento», sino que, por el contrario, han manifestado que «lo volverían a hacer».
«Esta amnistía no es más que decirles a fugados, procesados y condenados que nunca debieron ser detenidos, juzgados, condenados, encarcelados ni inhabilitados», según Sanz, quien ha alertado de que aunque el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, diga ahora que no va a haber referéndum de autodeterminación en Cataluña, podría «convertirse en un sí».
«Amnistiar es dar la razón a los que niegan que España es un Estado democrático y de derecho y proclaman que somos un Estado opresor», ha apuntado Antonio Sanz, para quien, aunque el presidente de Cataluña, Pere Aragonés, diga que la Ley de Amnistía es una «vía de resolución del conflicto político», es «al revés, es el trato privilegiado a quienes quebrantaron la convivencia entre españoles». Ha acusado al Gobierno central de permitir «todo este blanqueamiento de delitos que han sido condenados por los tribunales» para mantener a Pedro Sánchez en la Moncloa.
Financiación autonómica
Asimismo, Antonio Sanz ha indicado que, detrás de las «cesiones a partidos independentistas a cambio de la Presidencia del Gobierno está la quiebra de la igualdad entre españoles: Está la consagración de ciudadanos de primera y de segunda».
Ha aprovechado para denunciar que el actual sistema de financiación autonómica es «injusto con Andalucía y supone un agravio acumulado que supera los 15.000 millones de euros desde 2009», y ha reclamado la reforma del actual modelo y que no haya «privilegios» para unas comunidades en detrimento de otras.
«Sánchez antepone simplemente sus intereses y su afán por seguir en el sillón», ha indicado Antonio Sanz, censurando el «entreguismo» del presidente del Gobierno al independentismo.
«El problema es que España tiene hoy un presidente sin principio ni escrúpulo, dispuesto, por un puñado de escaños, a ceder al chantaje, al mercadeo de sillones y a saltarse todas las líneas de ruptura constitucional», ha sentenciado Antonio Sanz.
Asimismo, el consejero andaluz ha calificado al portavoz del PSOE en el Senado y secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, de «traidor claro a Andalucía» por no oponerse a esa Ley de Amnistía que pone «en peligro» la igualdad entre todos los españoles.
Sanz ha terminado su intervención lanzando un «mensaje de unión, puesto que España tiene que seguir siendo la casa común de todos los españoles»: «En ella podemos y debemos convivir con iguales derechos y deberes independientemente de lo que seamos, de lo que pensemos o de lo que sintamos». «Nuestros éxitos, nuestro progreso social y económico y nuestro prestigio en el exterior siempre han venido de la mano de la unidad y del esfuerzo colectivo de todos los españoles», ha agregado.
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