Miguel y Thais durante su presencia como recomendadores musicales en el ReggaeMad Fest 2024. | PLENA INCLUSIÓN MADRID

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Personas con discapacidad intelectual o del desarrollo se convierten este verano en 'recomendadores' musicales de la mano de Plena Inclusión Madrid, que les brinda la posibilidad de acudir a conciertos y ejercer posteriormente tanto de críticos musicales como de evaluadores de la accesibilidad que ofrecen estos eventos.

Miguel y Thais son dos de estos recomendadores, quienes el pasado 23 de julio acudieron para desempeñar esta labor al ReggaeMad 2024, celebrado en Autocine Madrid. «Repetiría seguro», señala Thais sobre su experiencia como recomendadora, aunque coincide con Miguel en las mejoras pendientes sobre accesibilidad, sobre todo cognitiva, a muchos de estos eventos. «Ni de broma podría ir yo solo», sentencia.

Ambos participan en los talleres culturales que ofrece la Fundación Juan XXIII, entidad dedicada desde hace más de 55 años a apostar por la inclusión socio laboral de las personas en riesgo de vulnerabilidad psicosocial, especialmente personas con discapacidad intelectual y de la que se benefician de forma directa más de 3.000 personas.

En declaraciones a Europa Press, Thais y Miguel señalan lo positivo de la experiencia como recomendadores y la utilidad que estas reseñas pueden tener para otras personas con discapacidad intelectual o del desarrollo a la hora de asistir a un concierto.

De hecho Miguel --que admite que su referente como crítico musical es el mítico locutor y periodista Joaquín Luqui (1948-2005)-- explica que tiene «un listado» de eventos a los que asistir en el futuro. «Sí que repetiría», afirma.

Por su parte, Thais, que se enteró por Miguel de la posibilidad de participar en esta iniciativa, defiende esta «oportunidad» y subraya lo mucho que le gusta ir a conciertos, a menudo en compañía de su familia. Ella se declara fan de la música pop en español, especialmente de artistas como Malú, David Bisbal, Estopa o Pignoise.

Asignaturas pendientes

Sin embargo, ambos apuntan a las asignaturas pendientes en materia de accesibilidad. Así, Miguel, que atiende a Europa Press en compañía de Julia, su persona de apoyo de la Fundación Juan XXIII, subraya los problemas que muchas personas con discapacidad intelectual tienen para poder llegar hasta los lugares donde se celebran los conciertos, y si bien dentro de los recintos la accesibilidad mejora, subraya otras cuestiones de tipo cognitivo como la señalización dentro del recinto o dificultades para adquirir alimentos en los establecimientos acondicionados. «Fue lo más complicado», reconoce, al tiempo que destaca las actividades complementarias a los conciertos y que fue algo de lo que más le gustó, reconoce.

Una de las cosas en las que coinciden tanto Miguel como Julia es la toma de conciencia en este tipo de eventos por parte de sus promotores con el estado de los baños públicos, pues para muchas de estas personas «es fundamental» para que puedan hacer uso de ellos.

También Thais coincide con su compañero en la necesidad de mejorar aspectos como la señalización, los accesos o la formación del personal que trabaja en los festivales. La propia Thais, reconoce, tuvo una mala experiencia al regresar, cuando fruto de la mala iluminación y la irregularidad del terreno que era necesario atravesar para llegar hasta el espacio tropezó y sufrió una caída. «Hay mucho que mejorar en accesibilidad en los conciertos», asevera.

El proyecto 'Recomendadores musicales' de Plena Inclusión Madrid persigue, apuntan sus responsables, a reivindicar el acceso a la cultura de las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo a través de la experiencia cultural.

También pone el foco en «el derecho a la participación cultural», habitando el espacio cultural como espectadoras de la cultura, y desarrollar una participación cultural «activa y crítica» a través de la redacción de críticas y recomendaciones musicales.

Así, entre los meses de julio y noviembre de 2024 se llevarán a cabo diferentes salidas culturales a salas de concierto, auditorios o teatros de la Comunidad de Madrid para disfrutar de la experiencia de la música en vivo.

Posteriormente, los participantes, como ya han hecho Thais y Miguel, deberán completar una ficha en la que valorar del uno al cinco el ambiente del concierto, la accesibilidad del espacio, la coordinación o el apoyo recibido durante el mismo, pero también la actuación del artista, de las instalaciones o la satisfacción general.

Crítica musical

Lo mejor y lo peor del evento son otras de las evaluaciones que deben recoger estos 'recomendadores', quienes además redactan una crítica musical de la actuación, incluidos los «momentos destacados» del espectáculo.

También para los artistas esta iniciativa supone una oportunidad para compartir experiencias con otro público, como recuerda la cantante y compositora Sofía Comas, quien este sábado actuó en la sala Escándalo del Hotel Canopy de la capital en un concierto acústico en el que también hubo entre el público 'recomendadores' de Plena Inclusión Madrid.

En declaraciones a Europa Press, esta artista cuya música desborda la etiqueta 'indie', confiesa la «ilusión» que le causa participar en esta iniciativa «fantástica» que ayuda a «visibilizar» la presencia de personas con discapacidad intelectual en los conciertos y demostrando que «son espacios para ellos», lo que puede «animar a otras personas» a acudir también.

Cofundadora de la banda madrileña Tucan y directora musical de la compañía de danza Zuk en varios espectáculos, en 2020 lanzó su primer disco en solitario en 2020, 'El verano será eterno' (Industrias Bala). Comas ofrece un recital en acústico al que asisten estos 'recomendadores' después de que se lo propusiera un conocido del mundo musical que formaba parte de la iniciativa.

«Es acercarse a la música de otra manera, conocer al artista, que tu voz tenga un espacio. Recordarnos que el público es un participante. Tengo una discapacidad intelectual, ¿y qué?», remarca la artista, quien defiende la importancia de avanzar con iniciativas como ésta en la «sensibilización» de toda la población, incluso el mundo de la música.

Así, defiende que la cultura es «un lugar de reunión y de compartir sentires», por lo que reivindica la idoneidad de la música para proyectos así, que ponen el foco en la accesibilidad de los lugares, al hilo de lo cual llama a apostar por espacios, como el escogido por ella para su concierto del sábado, que permitan ese acceso más sencillo a todos los públicos y que favorezcan otra forma de escuchar la música, lejos de formatos actuales, advierte, que «invitan a la fiesta, a hacerse la foto y a beber», lo cual respeta pero puntualiza que «la música no es solo eso».

Por todo ello, se muestra encantada con su participación en esta iniciativa de Plena Inclusión Madrid que acaba de nacer que permiten «compartir el amor por la música». «Sin iniciativas así, hasta que no se vuelve algo cercano, no eres consciente», sentencia.