Archivo - La consejera de Justicia y Derechos Humanos, María Jesús San José | Iñaki Berasaluce - Europa Press - Archivo

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La consejera de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco, María Jesús San José, ha reafirmado su compromiso con el apoyo a las víctimas y con la «salvaguarda» de su derecho a «una reparación justa del sufrimiento padecido».

San José ha intervenido en la Conferencia Internacional de Naciones Unidas sobre Víctimas del Terrorismo que se celebra entre este martes y miércoles en Vitoria-Gasteiz, con el lema 'La educación como herramienta para la prevención, la construcción de la paz y el empoderamiento de las víctimas del terrorismo'.

La consejera ha participado en el debate titulado 'Acción institucional para garantizar que las víctimas y supervivientes obtengan sus derechos y sean apoyados en sus necesidades', moderado por la directora general de Víctimas del Terrorismo del Ministerio de Interior, Montserrat Torija.

En su intervención, María Jesús San José ha mostrado su agradecimiento por la elección de Euskadi para celebrar esta conferencia. «Lamentablemente, aquí sabemos lo que significa el drama del terrorismo; han sido muchos los ataques a nuestra convivencia, hemos conocido diferentes organizaciones terroristas, así como la lacra de los abusos y torturas cometidos pretendidamente en combate», ha manifestado.

Por ese motivo, ha denunciado que el uso del terror para la imposición de un proyecto político «arrastra a la fractura social, al dolor y a un reguero de víctimas, todas ellas merecedoras de memoria, reparación y justicia».

"gestionar las heridas"

San José ha añadido que la sociedad vasca «está comenzando a gestionar las heridas que nos dejaron cinco décadas de terrorismo, de dolor y lágrimas, medio siglo marcado por el miedo, las amenazas y los asesinatos», tras lo que ha subrayado que todo esto ha dejado «una marca que tardará generaciones en desaparecer».

Sin embargo, ha asegurado que «es mucho lo que la acción institucional puede hacer en este camino». En este sentido, ha explicado que su departamento tiene el objetivo de «apoyar a las víctimas y salvaguardar su derecho a una reparación justa del sufrimiento vivido», por lo que no limitará su papel «al de un receptor pasivo», sino que «las escuchará e integrará como palanca de todas las políticas que les conciernen».

Asimismo, ha apostado por «acoger su experiencia como una contribución positiva de una educación para la paz, porque la ciudadanía y las instituciones vascas no podremos ser plenamente solidarios con los demás si no somos capaces de leer que la misma injusticia cometida en otros países se cometió también aquí».

La consejera de Justicia y Derechos Humanos ha señalado que todo ello debe hacerse desde «el firme compromiso con una memoria deslegitimadora y crítica con los victimarios, una memoria que huya de sectarismos y negacionismos, que ofrezca herramientas a la ciudadanía para recomponer sus vivencias del terrorismo asumiendo un principio básico: matar estuvo mal y fue injusto con las víctimas».

Contra los discursos de odio

María Jesús San José ha expresado su deseo que de que el silencio no forme parte de la herencia legada a las nuevas generaciones. «Esa es la memoria, la verdad y la reparación que merecen las víctimas; y las futuras generaciones para que nunca más vuelva a repetirse», ha afirmado.

En este sentido, ha indicado que «hoy, cuando los discursos de odio vuelven a extenderse por Europa, debemos mandar un mensaje alto y claro a la ciudadanía: sabemos que ese camino es estéril, solo arrastra al dolor, al miedo y a la muerte».

La consejera ha concluido su intervención asegurando que el País Vasco «está comprometido con la convivencia y mira con esperanza al futuro». «Tenemos una sociedad que construye su memoria cimentada en el respecto a los derechos humanos y los valores democráticos para una convivencia basada en el reconocimiento del error que supuso asesinar, extorsionar o torturar», ha manifestado.