TW
0
TONI LIMONGI El artista Joan Barbarà explicó ayer la obra en grabado de Miró a una treintena de artistas, estudiantes de arte y galeristas, en una visita guiada a la exposición «Miró- Barbarà. Processos del gravat», que se expone en la Fundació Pilar i Joan Miró de Mallorca y que está formada por todos los elementos que hace unos años Joan Barbarà donó desinteresadamente a la Fundació. Barbarà, que fue amigo y colaborador del pintor, recuerda: «Este trabajo refleja muy bien la exigencia que Miró tenía al hacer su trabajo. Era muy metódico en todo lo que hacía».

El prestigioso grabador está actualmente impartiendo el curso «Taller de gravat sobre el color i les seves incidències» en los talleres de la Fundació con el objeto de difundir las principales técnicas y procedimientos del arte impreso. Barbarà explicó a los asistentes los secretos de las series presentadas en la exposición: «Els gossos», «Gaudí», «Enrrajolats», «Rupestres» y «Barb». «Yo preparaba minuciosamente las planchas. Miró iba desarrollando sus ideas y luego me daba instrucciones precisas de cómo había que trabajarlas», explica. A veces, los grabados eran fruto de «incidentes» producidos por el ácido vertido sobre los paneles de cobre.

Joan Barbarà fue colaborador de Miró desde el año 1957. A raíz de una beca coincidió con él en el taller Lacorurrière de Montmartre. Más tarde realizó con el pintor catalán una serie de carpetas sobre poemas de Foix y Salvat-Papasseit. Finalmente a finales de los años 70 se desplazó a Mallorca para ayudar a su amigo y maestro.