Entre club neoyorquino e iglesia de Missouri. Ése fue el ambiente
que se respiró la noche del viernes en Costa Nord con la actuación
de Golden Gospel Singers, liderados por Bob Singleton. El grupo
repitió en el auditorio valldemossí, donde actuó el verano pasado,
aunque este año Singleton viajó con músicos y cantantes distintos a
los que se escucharon en 2000. Golden Gospel Singers cuenta con
tres formaciones diferentes y Singleton es el elemento aglutinador,
un ser peculiar que dejó su trabajo en IBM para dedicarse a cantar
gospel casi como misión evangélica.
El grupo no defraudó con una selección de temas a modo de paseo
por el gospel más popular, pensada para que pudiera ser coreada
desde las gradas, con temas tan conocidos como «O when The Saints».
El concierto se inició con dos canciones de sonido muy africano,
«Si Ya Humba» y «Tu Na Ku Penda», interpretadas por las tres
vocalistas, y ya desde entonces el grupo arrancó aplausos. Luego
salió Singleton y comenzó la auténtica fiesta. El público estuvo en
pie buena parte del concierto porque Singleton y los suyos
prácticamente le obligaron con su música.
Hubo muchos ¡aleluyas! ¡Jesús! y hasta clase de aeróbic. Todos
bailaron, jóvenes y mayores. Incluso los príncipes de Kent, "más la
princesa Cristine", en primera fila, acompañados por Ricardo
Cisneros y Cristina Macaya. Detrás, los pintores Menéndez Rojas y
Maria Carbonero, junto a Patricia Estrada, se desfogaron con ganas.
También estuvieron allí el escritor Pere Morey y el escenógrafo
Rafael Lladó. Singleton, gran showman, unas veces recordó a un
pastor y otras a un vendedor de Biblias, papeles que han poblado el
cine de Hollywood. Cantó, habló, bailó, encandiló a todos y se
despidió chapurreando catalán.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.