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La pintura de Ricard Anckermann «Alegoria», situada en el techo de la Sala del Senat del Parlament de les Illes Balears, ha sido restaurada por el experto José Maria Pardo, que ha recuperado el aspecto original de la obra. Esta ha sido la principal labor realizada en este recinto con el objetivo de rehabilitar la Sala del Senat, en la que se ha cambiado el parquet, se ha restaurado una gran lámpara de cristal, la chimenea y se ha puesto una nueva instalación eléctrica. Las obras han supuesto un desembolso total de 30 millones de pesetas.

Uno de los trabajos más importantes realizados por José María Pardo ha sido liberar la obra de Anckermann, una pintura circular de cuatro metros de diámetro realizada a finales de la década de 1880, de una obra realizada en los años 60 por Federico Molina que extendía la pieza original a todo el techo e, incluso, se superponía en algunas partes a la de Anckerman. Pardo y su equipo se han encargado de retirar la pintura de Molina, lo que les ha permitido descubrir nuevos elementos de la obra que habían quedado tapados.

La obra de Anckermann se encontraba en muy mal estado, ya que estaba colocada sobre una superficie de novopán, además de compartir espacio con una pintura de muy inferior calidad como era la de Federico Molina. Por este motivo, José María Pardo tuvo que desencolar la tela, eliminar las diversas capas de pintura que tapaban buena parte de la obra de Anckermann, colocarla sobre un nuevo soporte y realizar una profunda limpieza para eliminar las capas de grasa y suciedad.

Aunque «Alegoria» no está muy documentada, se sabe que primero estuvo en la casa Gual de Torrella de Palma. No se sabe muy bien cómo, la pieza acabó en el Círculo Mallorquín entre 1955 y 1960. La pintura se utilizó para decorar el techo de la Sala del Senat. Fue en 1962 cuando Federico Molina realizó la obra que unificaba la pieza de Anckermann con el resto del techo y que ahora se ha eliminado. En cuanto al resto de la sala, se ha restaurado todo el parquet, de más de 100 años de antigüedad y con incrustaciones de ébano, lo que ha provocado que se desmontara pieza a pieza; se ha restaurado una gran lámpara de cristal de Guardiola y se ha modificado la iluminación.