Bárbara Juan, ganadora del Premi Rei en Jaume 2001 de Calvià,
inaugura esta tarde una instalación en la sala de exposiciones del
Ajuntament en la que construida a base de cojines, elementos que
trabaja en el último año y que expuso por pimera vez en Dubrovnic
(Croacia), en una bienal de arte mediterráneo.
Como «un abrazo, de texturas suaves, mullidos», los cojines
objeto de Bárbara Juan, de lienzo, viven como individualidades o
forman parte de conjuntos pero, de una u otra forma, narran su
autobiografía, un discurso que actúa como hilo conductor de su
trabajo. Así se puede entender la instalación que presenta en
Calvià. Acción y un claro componente lúdico es la obra de Bárbara
Juan desde que construía cajas, contenedores de textos e imágenes
envueltas en plásticos de desecho.
Los cojines, que también pueden tomar formatos clásicos como los
del cuadro son, a la vez, «una manera de escapar de la rigidez del
bastidor», dice la artista. De este modo se puede «leer» la
instalación que inaugura en Calvià, dos líneas rectas en las que
«los cojines tienen doble lectura, como puntos o en un recorrido».
Imagenes de revistas, fotografías familiares antiguas, textos de la
artista.
Bárbara Juan estampa el lienzo y allí deja su memoria y su
presente. «Desde mis inicios lo autobiográfico ha estado presente
en mi obra, pero no sabría explicar el motivo». Otro artista, Willi
Sanz, lo escribió: Sus piezas «surgen de la fascinación de lo que
se ha digerido con los ojos, se recuerda y se vislumbra
borrosamente, cual vestigios de aquel drama quebradizo y
contradictorio». Ella investiga y da vueltas en torno a esta
filosofía personal, a un modo propio de entender la vida y el
arte.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.