Miquel Barceló muestra una de las obras a Antich, Munar y Salom. Foto: JOAN TORRES

TW
0

Ante una avalancha de periodistas, el artista Miquel Barceló, conocido por su escaso apego a las presentaciones públicas, resistió como un campeón. «Nunca hubiera esperado este recibimiento», dijo rodeado de cámaras y micrófonos que no le dejaban respirar. Tras un recorrido por su exposición de sa Llonja comenzó la batería de preguntas, que respondió con largueza.

Barceló, que ayer inauguró una colección de 21 pinturas datadas entre 1983 y 2002, aseguró que hasta ahora no había expuesto en Mallorca un proyecto de esta envergadura porque «no me lo había pedido nadie». En esta ocasión «hace dos años que estamos hablando con esta Administración y las cosas se han hecho como se han de hacer». El artista recordó su primera exposición en Palma, en los setenta, «cuando era 'molt jove'». «Eran otras circunstancias». Por ejemplo, «no había ningún periodista», apuntó entre risas. La exposición de Palma completa un recorrido por su trabajo que se puede ver en Eivissa, Formentera y Menorca en una «vuelta a casa literalmente» en la que ha «practicado un poco de interinsularidad, que no la practicamos nunca». Así definió este proyecto organizado por el Govern.

De «fantástico» calificó el montaje del comisario Enric Juncosa en sa Llonja, quien hace días destacó la fidelidad del artista a la pintura. «Tal vez la pintura no está de moda como en los ochenta, por suerte para todos. Por desgracia volverá a estarlo porque las modas son siempre efímeras y pasajeras, y cíclicas también; ya nos podemos ir preparando para otra oleada de pintura; las modas sirven para una huida hacia adelante y pocas cosas más». La de sa Llonja es una exposición «emocionante porque es mi casa y porque nunca había hecho una exposición tan importante aquí».

Ante el revuelo de ayer abogó por la normalidad. «No es normal que haya tantos periodistas», dijo entre risas, pero «si debe ser normal poder mostrar mi obra aquí». Ahora lo hace a lo grande con la intención de que no se quede en «una muestra local; entre todos hemos hecho un esfuerzo para que el proyecto vaya más allá y exponer en las cuatro islas claro que tiene un sentido político, que asumo totalmente».