Joana Morell, de siete años, sabe que va a hacer un cuadro pero no
sabe qué pintará. Con un pincel en la mano, espera a que le venga
la inspiración. A su lado, su madre la observa. «Venimos cada año
porque se divierten y, además, aprenden cosas nuevas». María ha
llevado a sus dos hijas y a su hijo a celebrar Sant Joan en la
Fundació Pilar i Joan Miró, una conmemoración que, durante un día,
abrió las puertas del centro a todo el mundo.
Al lado de Joana está su hermana, Pepa Morell, de 16 años. «Hace
mucho que vengo y, asistir a los talleres, me ha enseñado a saber
quién era Miró, a reconocer sus cuadros y a desarrollar mi
imaginación». Precisamente, los talleres didácticos que se han
llevado a cabo los sábados de los últimos meses en la fundación
fueron uno de los protagonistas de la jornada junto con la música,
las marionetas con la obra «100% teresetes» de Teresetes Migjorn y
los castellers. Y, sobre todo, la imaginación.
«Les enseño a usar los recursos del entorno en el arte a través
de la utilización del esparto, un material natural, y de botellas,
un elemento industrial», afirmó María Isabel Uribe, la encargada
del taller «Descobreix amb nosaltres la màgia de l'espart!».
Guillem Nieto y Àlvaro Vicente, de 10 y 8 años respectivamente,
fueron dos de sus alumnos. El primero hacía un conejo y, el
segundo, un extraterrestre. «Me enseñan a reciclar, igual que
Miró», afirmó Àlvaro.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.