Paco Mir, sentado ante la obra «Fifteen holes», de Miquel
Barceló, en un banco del Museu Es Baluard. Está mirando al
infinito, como abstraído. De repente, todo se para y aparecen las
cámaras. Paco Mir se levanta y se reúne con Carles Sans y Joan
Gràcia. Son Tricicle y están en el museo grabando los sketches que
se emitirán el próximo domingo durante la gala que La Primera y el
Canal Internacional de TVE realizarán en el Auditòrium dentro de
los actos de inauguración del centro. Los sketches servirán para
enlazar las actuaciones musicales, como, por ejemplo, las de Julio
Iglesias o Gloria Estefan, con la presentación de Es Baluard.
«La mejor manera de explicar el museo es enseñarlo a los
espectadores», aseguró Paco Mir. Por eso, sus pequeñas historietas
sin palabras narran «la típica visita que realizaría una persona»,
desde la entrada hasta la salida, desgranando «cómo es la
criatura».
Dos turistas, un vigilante que controla que no destrocen nada,
dos operarios que realizan los últimos retoques y la directora de
Es Baluard, papel interpretado por la mallorquina Cati Solivellas,
son los personajes que aparecerán en los seis sketches. «Lo fácil
sería reírse de cualquier cosa, pero el objetivo es que la gente
visite las obras y la arquitectura, no que se ría de ello», afirma
Joan Gràcia. De ahí que el humor se centre «en los personajes», no
en el contenido. Para poder crear los diferentes roles, los tres
actores recorrieron, semanas atrás, el Museu Es Baluard para
conocer de primera mano el centro y poder idear las pequeñas
historias.
Los números serán interpretados con mímica, como es habitual en
este trío, y el único texto con el que contará la parodia servirá
para introducir los distintos chistes, interpretados cada uno de
ellos en un ámbito distinto del centro. En esta ocasión, el humor
será «más sutil» y menos «chabacano» para, así, poder acercar a los
espectadores el museo.
Tricicle terminará el rodaje mañana, tras tres días intensos de
ensayos y grabaciones. «Hemos incluido la figura del turista porque
hay que promover el turismo cultural, enseñar al visitante que, en
la Isla, existe algo más que sol y playa», asegura Carles Sans. De
esta manera, «tanto el turista como los mallorquines podrán
disfrutar de Es Baluard». Un centro que, en palabras de Sans, se
merece «un diez». «Se ha sabido integrar la parte histórica con la
moderna, ofreciendo un edificio nada agresivo con el entorno». Para
Tricicle, «las dos épocas combinan perfectamente».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.