El libro «Es Baluard de Sant Pere i la ribera del moll», editado
con motivo de la inauguración del Museu d'Art Modern i Contemporani
Es Baluard, fue eleiv motiv de la conferencia que ayer impartió
Jaume Llabrés, coautor del mismo junto a Aina Pascual. El
historiador diseccionó el proceso evolutivo de este elemento
integrante del sistema defensivo de Ciutat desde la Edad Media
hasta la actualidad, aunque haciendo un especial hincapié en la
época renacentista.
Llabrés inició su disertación realizando una «conveniente»
introducción sobre la topografía primitiva del barrio. «El baluard
de Sant Pere ocupa uno de los lugares geoestratégicos más
importantes de la bahía de Palma. La actual configuración urbana de
esta zona, con los terrenos ganados al mar a lo largo del siglo XX,
nos distraen sobre esta circunstancia», apuntó.
Remontándose al siglo XVI, Llabrés explicó que entonces «la
fortificación de la ciudad era un descontrol de muros, torres y
puertas. Además, el recinto estaba afectado por la indisciplina
urbanística y los avances de la artillería hicieron que quedase
totalmente obsoleto, dejando la ciudad indefensa». Afirmó que esta
situación no se resolvió hasta que Giacomo Palearo, más conocido
como el capitán Fratin, «dio un empuje definitivo a la
planificación del actual espacio, conocido con el nombre de
renacentista».
Clarificó que «este primer bastión se encuentra hoy
prácticamente desaparecido, porque el nuevo baluard del siglo XVII
lo utilizó como base» y que «la configuración definitiva de la
planta y el alzado del Baluard de Sant Pere se efectúa a principios
del siglo XVIII, cuando se pone en marcha la muralla del mar que se
había de adaptar al trazado de la calzada que debía unir toda la
ribera».
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