Actor de teatro, cine y televisión de extensa trayectoria
profesional, Jaime Blanch presenta este fin de semana en el
Auditòrium «La ratonera», clásico thriller de Agatha Christie. De
éste y otros temas nos habla en esta entrevista.
-«La ratonera» es la obra más representada de la
historia del teatro. ¿Podría decirse que hay un público
agathachristiano?
-Bueno, una de las ventajas que tiene Agatha Christie es que
anuncia una cosa y la vende. La gente sabe lo que viene a ver.
-¿Diría, entonces, que es una pieza
comercial?
-Podría ser, aunque lo importante es la calidad. Cuando uno lleva
unos meses en esta profesión, y yo ya llevo unos cuantos, se da
cuenta de que no hay a priori ni mejor ni peor texto. Yo antes
pensaba que había géneros menores. Me he dado cuenta de que no hay
géneros menores, sino directores, montajes, actores y públicos
menores.
-En este sentido, ¿cómo vislumbra usted el futuro del
teatro español?
-Debe adquirir un rol más comprometido.
-¿A qué se refiere?
-El teatro en España lleva mucho tiempo estancado. Algunos
productores se han acostumbrado a que los gobiernos les solucionen
la papeleta del riesgo. Faltan productores de verdad, cuyo único
interés no sea sólo el de ganar dinero.
-¿Hay algún futuro en las nuevas
generaciones?
-Sí. Y es más, creo que éstas van a provocar un cambio de estética.
Este pensamiento me ilusiona porque yo empecé muy joven en esta
profesión y sigo creyendo en ella, aunque cada día soy más exigente
conmigo mismo y con los demás. No en vano, cada día admiro más a
los anglosajones, que a lo nuestro lo llaman play, que es jugar.
Creo que lo que hay que hacer en esta profesión es divertirse. Eso
quiere decir amor.
-¿Qué le daría a su profesión por amor?
-No más de lo que le doy ahora. A la profesión hay que darle lo
justo. Yo no espero morirme con las botas puestas.
-En cuanto a la programación televisiva, ¿qué opinión le
merece?
-Aunque las audiencias se hayan disparado y sean las mayores de
todos los tiempos, creo que se está haciendo la peor televisión de
las dos últimas décadas, y no estoy sólo refiriéndome a los
programas de telebasura y de la prensa «marrón» o «genital», como
yo la denomino. Hay que pensar que la televisión es también un
producto de consumo que va conformando el perfil de un pueblo,
desgraciadamente. Hay pueblos manipulables, y el nuestro lo es.
Prueba se ha dado de ello.
-¿Hay alguna solución?
-Que la gente use el dedo índice para apagar la televisión. Sin
embargo, la gente la devora.
-¿Y para el cine?
-Carecemos de una infraestructura comercial adecuada, porque se ha
hecho una política cultural respecto al cine muy equivocada. De
todos modos, el cine español de autor está despuntando.
«La ratonera», clásico thriller de la reina del suspense, la
escritora inglesa Agatha Christie, embaucará con un toque de «humor
sutil» al público mallorquín, tendiéndole la trampa urdida por esta
famosa autora inglesa, cuyo personaje también es introducido por su
director, Ramón Barea, en este «thriller» encabezado por el actor
madrileño Jaime Blanch.
Parte del elenco de actores que representan este espectáculo
teatral -el propio Blanch, Cristina Rivera, Juan Luis Mediaraz y
Pablo Calvo- presentaron ayer este espectáculo, cuyas funciones
albergará el Auditòrium de Palma hasta el próximo 22 de agosto.
Este drama, que se estrenó en 1952 en Londres y desde entonces
se ha representado ininterrumpidamente, cuenta también con la
presencia de Clara Badiola, Fermín Sales y Ane Gabarain.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.