La autorización del CIM para construir un aparcamiento en la
calle Antoni Maura de Palma, donde se hallaron restos
arqueológicos, ya no es válida, según ARCA. La entidad sustenta su
denuncia en la Ley de Procedimiento Administrativo.
En un comunicado de ARCA se explica que la autorización dada por
la Comisión de Patrimonio del CIM, en julio de 2004, «ha quedado
sin efectos» porque el 18 de octubre de 2004 ARCA interpuso un
recurso administrativo en el que pidió la suspensión de dicha
autorización y no ha sido contestado.
La respuesta la tenía que dar el Consell Executiu del CIM. Pere
Ollers, presidente de ARCA, dijo que esta situación, «nueva desde
el punto legal», provocada por la falta de respuesta en el plazo
que marca la ley, ha sido comunicada al CIM, al Ajuntament, a la
Sociedad Municipal de Aparcamientos y a los constructores Necso y
Llull sastre «con la advertencia de que pueden incurrir en una
actuación ilegal administrativamente y penalmente, incluso». Si no
se paran las obras, ARCA las «denunciará al Juzgado de Instrucción
por una posible prevaricación por la actuación de las
Administraciones».
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