Noche de triunfos para el cine en español

El triunfo de «Mar Adentro», de Alejandro Amenábar, como mejor película en lengua no inglesa, llevó el español al primer plano de la ceremonia de los Oscar, en la que destacó además el uruguayo afincado en Madrid Jorge Drexler con el premio a la mejor canción. Amenábar, que dejó que los periodistas toqueteasen a gusto el Oscar que tanto le ha costado conseguir, tuvo unas palabras para Javier Bardem, el protagonista de «Mar adentro» que siguió los Oscar por la televisión desde España y con quien habló por teléfono al finalizar la gala. Como recordó el productor de «Mar adentro», Fernando Bovaira, Bardem debería de haber estado entre los candidatos a mejor actor de esta edición. «Yo sabía que era muy difícil en un año como este», señaló Amenábar en referencia a una edición de los Oscar donde la categoría de mejor actor estaba copada con grandes nombres como Johnny Depp, Leonardo Di Carpio o Jamie Foxx, quien se alzó como ganador por su protagonista en «Ray».

Mientras tanto, el uruguayo Jorge Drexler, autor de la balada «Al otro lado del río», primera canción en español que concursa para los Oscar -que fue interpretada por Antonio Banderas y Carlos Santana- consiguió otro triunfo para el cine en español. Drexler se metió al público en el bolsillo cuando cambió el tradicional discurso de agradecimiento por una interpretación en español de un fragmento de su canción. De esta manera, el artista se resarció de la decisión de los productores de la ceremonia de no invitarle a cantar el tema que el había compuesto y cantado para la película «Diarios de Motocicleta». «Yo quería cantar, y en cada intervalo (de los Oscar) practicaba la canción», señaló Drexter, que había calculado incluso hasta dónde podía llegar en los aproximadamente 22 segundos de que disponía para hablar.

El uruguayo, que desde hace diez años vive en las cercanías de Madrid, señaló que este Oscar «va para España, mi casa está allí», y señaló que le conmovía que el actor mexicano Gael García Bernal hubiera renunciado a presentar este premio como protesta por la decisión de los organizadores de la gala de no dejar cantar al autor de la canción. Por otra parte, «Million Dollar Baby», de Clint Eastwood, fue la gran triunfadora de la noche de los Oscar, en la que dejó K.O. a sus adversarios, especialmente a «The Aviator». La última obra de Eastwood fue fiel al espíritu de triunfo y superación que domina su trama y logró cuatro estatuillas: como mejor actriz (Hilary Swank), mejor actor secundario (Morgan Freeman), mejor director y mejor película. Pero cuanto más se repitió el símil pugilístico en su victoria, más quiso evitar Eastwood que los Oscar se redujeran a un combate entre su «Million Dollar Baby» y «The Aviator» de Martin Scorsese. «Eso me entristece», señaló Eastwood al recordar su amistad con «Marty», otra leyenda del cine a la que admira por su defensa del cine y por su carrera.