Que el edificio diseñado por Rafael Moneo para la Fundació Pilar i Joan Miró se ha quedado pequeño hace tiempo es una cuestión que ya se debatía en pasadas legislaturas. Ahora, el concejal de Cultura de Cort, Rogelio Araújo, presidente de la entidad, presentó ayer una propuesta al patronato para paliar dicho déficit que consiste en una permuta de terreno en el solar del aparcamiento por la cual la Fundació conseguirá el espacio que necesita para oficinas y almacén, como ya avanzó este periódico en su sección de noticias locales.
En la reunión de ayer se decidió que la comisión ejecutiva de la Fundació, «junto con algunos miembros del patronato que se han ofrecido», se estudiaría el proyecto presentado por Araújo y que el resultado de ese análisis se llevaría a una nueva convocatoria, que sería extraordinaria, del patronato. En caso de aprobarse la propuesta, el solar del aparcamiento de la Fundació se uniría a otro vecino donde su propietario construiría una plaza pública y un edificio de viviendas. La Fundación saldría beneficiada «con cero gasto», según explicó Araújo, quien aseguró que tiene «todos los informes favorables».
En el edificio de nueva construcción pasaría a titularidad de la Fundación un espacio de 350 metros en la planta baja, con salida a la citada plaza, donde se ubicarían las oficinas del centro de arte. También se construiría un aparcamiento subterráneo «para uso exclusivo de la Fundació y sus visitantes» y se contaría con otro espacio de 500 metros cuadrados para almacén.
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