Ramon Bassa, Toni Xumet, G. Janer Manila, Francesc Moll, Gracià Sánchez y Miquel Segura.

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A primera vista, la Feria de Fráncfort parece una sucesión de pasillos, stands grandes y pequeños, mesas y sillas para entablar conversaciones, cafés, bombones y galletas para los invitados y un sinfín de libros y ninguno a la venta. Sin embargo, Fráncfort es mucho más que eso. Es el evento literario más importante del mundo, que reúne a 7.272 exhibidores de 113 países que presentan más de 380.000 títulos.

Es el mercado de los derechos de autor, el lugar para comprar y vender títulos y escritores o para entablar contactos. Aquí están cinco editores de Balears que han acudido con el Institut d'Estudis Baleàrics (IEB), institución que presentó el jueves el segundo número de la revista Ooohéee. El Gall, Editorial Moll, Documenta Balear, Edicions del Salobre y la UIB han acudido este año con un programa concreto enfocado, sobre todo, a 2007, cuando la cultura catalana será la invitada de honor de la feria.

No se puede venir a Fráncfort sin una completa agenda de propósitos, ya que recorrer los 171.790 metros cuadrados que ocupan los 13 pabellones es imposible. La mayoría acude hasta la ciudad alemana para presentar sus últimas novedades, como, por ejemplo, la Universitat. Ramon Bassa, director del Servei Lingüístic, representó a la institución, que acudió para mostrar sus Vocabularis bàsics, con entradas en francés, inglés, catalán y castellano, y para conocer de primera mano qué se hace en el resto del mundo. «He visto cosas muy interesantes», afirmó.