El director Rafa Cortés, en el centro, posa con el equipo del filme.

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LAURA MOYÀ (CANNES)
Tal vez el no participar en la competitiva Sección Oficial del Festival de Cannes hizo que, ayer, los miembros del equipo de Yo, la ópera prima del realizador mallorquín Rafa Cortes, se tomaran con tranquilidad el hecho de presentarse en el certamen francés como la obra ganadora del Premio de la Crítica Internacional (FIPRESCI). La película se proyectó pasado el mediodía en el espacio Miramar y ante un público que ya hacía cola una hora antes de que empezara la sesión.

La expectación dio como resultado que la sala se llenara de un variopinto grupo de espectadores conocedores de las peculiaridades de la Semana de la Crítica. En esta sección, no se valora quién es el protagonista o quién dirige, sino que la cinta sea diferente y que no se adapte a los cánones del cine más comercial. Y, sobre todo, que la crítica considere que tiene la suficiente calidad como para protagonizar su semana. Es decir, no tiene nada que ver con el Cannes más hollywoodiense.

Como recordaron los representantes del FIPRESCI antes de que empezara el pase, Yo obtuvo el Premio de la Crítica Internacional en el Festival de Rótterdam. De entre todos los FIPRESCI de los diferentes certámenes, se escogió uno y se le dio una segunda oportunidad, consistente en asistir a Cannes como película revelación. En esta ocasión, la escogida ha sido Yo, que protagoniza un omnipresente Àlex Brendemühl.