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JOANA NICOLAU (NANCY)
La Coral Es Fortí prosigue con éxito su programa de actuaciones en el Festival International du Chant Choral de Nancy-Voix du Monde en la Lorena francesa. En agradecimiento a las familias de diferentes localidades, que a lo largo de estos días han acogido a los integrantes de las corales extranjeras que participan en esta edición, tuvo lugar el viernes una intensa jornada en la que los coros extranjeros actuaron para sus anfitriones.

En el caso de la formación mallorquina, ofreció sendos conciertos en una Maison de Retraite de Einville y en la iglesia de Crévic. En ambas actuaciones, dirigidas por el director suplente, Jesús Albertí, el repertorio ofrecido se centró en la música popular de diferentes culturas. En el concierto de Einville fueron especialmente aplaudidos el cántico espiritual negro, Swing low sweet chariot, la Salve rociera y Oh Sole mío.

Mención al margen merece la exhibición de danza con la que esta agrupación vocal y musical acompaña determinados temas del folclore de Andalucía y Mallorca. La vistosidad de los bailes ofrecidos con El Parado de Valldemossa o Sevillana de mi adiós cautivaron al público asistente a la primera actuación. Ya por la noche, en la parroquia de Crévic, destacó la interpretación de la composición israelí, Haredech o de la Salve rociera.