Las 250 lágrimas de la artista Glòria Mas se presentan en el Museu Es Baluard

La artista mallorquina Glòria Mas presentó ayer en la Sala Aljub del Museu Es Baluard su reflexión y crítica a los grandes males de la humanidad y a los acontecimientos mundiales más actuales en su instalación Aporia.

La directora de Es Baluard, Marie-Claire Uberquoi, destacó el trabajo artesanal realizado en las 250 lágrimas de cristal que centran esta exposición, en la que, además, toman protagonismo las imágenes proyectadas sobre las paredes y el sonido.

Una de las novedades de la velada consistió en averiguar qué autoridades asistirían al acto estrenando nuevos cargos y quiénes repetirían. Una de ellas fue Maria Antònia Munar, presidenta del Parlament. En su misma situación estuvieron otros políticos como el alcalde de Sóller, Guillem Bernat, o Cristina Ferrer, en representación del Ajuntament de Palma. Por otra parte, repetían cargo los todavía conseller del Cultura del Govern, Francesc Fiol; la consellera de Cultura del Consell, Dolça Mulet; así como la directora general de Cultura en funciones, Catalina Sureda. Francisca Bennàssar acudió como regidora y, Ramon Socías, como delegado de Gobierno.

La propuesta, que podrá visitarse hasta el próximo 2 de septiembre, fue visitada por los asistentes a la inauguración. La artista Glòria Mas compartió impresiones sobre su obra con algunos invitados y autoridades durante el recorrido por el espacio.

Entre los asistentes, algunas caras conocidas. No faltaron, entre otros, los artistas Jaume Mir, Amelia García, Miquela Vidal, Patrick Guino, Maria Carbonero, Pep Guerrero, Francesca Martí, Pep Llambias, Teresa Matas o Ñaco Fabré. Además, asistieron el galerista Gabriel Vanrell; Patricia Estrada, de Pelaires; Xavier Mayol, presidente del Ferrocarril de Sóller; el abogado Rafel Perera; la comisaria de arte Pilar Ribal, o la crítica de arte Rosa Quetglas, que se ha encargado de realizar el texto principal del catálogo de Aporia. Tras el recorrido por el espacio, y tras contemplar el original y contundente trabajo de Glòria Mas, los asistetes se reunieron en la entrada del Museu d'Art Modern i Contemporani de Palma, donde pudieron disfrutar de un cóctel.