Todavía no ha entrado en La Misericòrdia ni se ha reunido con su antecesora, Dolça Mulet, pero sabe que le esperan cuatro años intensos. Joana Lluïsa Mascaró, la nueva consellera deCultura del CIM, se marca como objetivos la creación del Museu Marítim y que el Teatre Principal se convierta en el buque insignia de las artes escénicas isleñas.
-¿Cuáles serán, a nivel general, sus líneas de trabajo?
- Impulsar toda actividad creativa, desde la literatura popular hasta el arte moderno. Prestaremos una especial atención a los museos y, en un plazo inmediato, a La Real y a Son Real. La recuperación del patrimonio será otro de las ejes de esta legislatura, sobre todo la protección y la rehabilitación y, algo aún más importante, darles un uso. También queremos ampliar la red de casas museo y crear centros de interpretación.
-¿Qué elementos patrimoniales recuperarán?
-De todo tipo, desde una fábrica emblemática hasta Bellpuig, que nos gustaría convertir en un centro de interpretación. Es decir, entendemos el patrimonio en un sentido amplio.
-¿Qué pasará con el Museu Marítim?
-Me gustaría que fuera uno de los proyectos estrella de estos cuatro años. Queremos hacer un museo en red, que no tenga una ubicación central ni un gran edificio, sino pequeños focos por toda la Isla. Para conseguirlo, hay que desarrollar la Llei de Museus, que todavía no se aplica al cien por cien. Hay que demostrar que un museo no es una colección de cosas para enseñar, y sí un foco económico, pedagógico y turístico.
-¿Habrá casa museo Blai Bonet? ¿Potenciarán la de Llorenç Villalonga y la del Pare Ginard? ¿Crearán alguna?
-Me gustaría que se completara la casa museo Blai Bonet, cuyo proyecto está terminado desde hace años. Las tres casas museo deben tener una programación estable. Estudiaremos la posibilidad de crear alguna nueva, aunque esta cuestión todavía está por estudiar.
-El Teatre Principal es el emblema en materia cultural de Mallorca. Recién inaugurado y cerrado para terminar de adecuarlo, ¿empezará su actividad el próximo mes de septiembre?
-Me gustaría poder abrirlo en septiembre con una programación de calidad y coherente. Todavía no sé en qué estado se encuentra, por lo que no puedo hablar con seguridad qué tipo de actividades se han programado.
-Pero lo potenciarán.
-Tiene que convertirse en el buque insignia. El objetivo es idear una programación que no se base en grandes acontecimientos puntuales, sino que tenga estabilidad y que se convierta en un referente a medio y largo plazo. Es mejor para la cultura y para Mallorca. Además, todo el mundo tendrá cabida. Todavía no sé quién será el gerente, pero conocerá el sector, ni cómo se dividirá el trabajo a nivel interno. Eso lo veré cuando nos reunamos todo el equipo.
-¿Qué pasará con los Premis Mallorca? Se pusieron en marcha tras la creación de los Ciutat de Palma en castellano, que ahora regresarán a la normalidad y serán sólo en catalán.
-La nueva convocatoria ya se ha presentado y los nombres de los miembros del jurado tienen que conocerse antes del 20 de agosto. Nuestra intención es continuar con la misma dinámica de las dos ediciones anteriores. No sólo hay que prestigiar las instituciones, también hay que prestigiar la lengua catalana a través de los productos culturales. Y qué mejor manera que mediante el Premi Mallorca.
-¿Qué planes tiene para Son Real?
-Primero hay que escuchar la opinión de los técnicos y, después, decidir si hay que ampliar el área de protección. Respecto al patrimonio,también es necesario ayudar a aquellas personas que tienen propiedades protegidas porque, a veces, es muy caro mantenerlas.
-Una de los puntos a favor de esta legislatura es que todas las instituciones son del mismo color.
-Sí, eso nos permitirá colaborar y coordinarnos mucho mejor que si perteneciéramos a partidos diferentes. Podremos llevar a cabo proyectos conjuntos con tranquilidad. Es una gran suerte.
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