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JOAN CABOT Entre muchas otras cosas, Tindersticks le dieron nombre a una de las mejores bandas de rock de la Isla con una de sus canciones, El Diablo en el Ojo, que a su vez estaba tomado de una novela del mexicano Jesús Gardea. Además de eso han sido uno de los grupos británicos más arrebatadores de la última década gracias a sus melancólicas instrumentaciones y la carga literaria de sus letras, algo que los distanciaba de la mayoría de grupos de su generación y los convirtió en el refugio para todo aquel que buscara cierta dosis de drama romántico en la escena rock. Y era precisamente el espíritu heroico de los poemas de Byron el que encarnaba su líder, Stuart A. Staples.

Staples será la guinda del festival Waiting For Waits. Cada año hay un concierto que sobresale, y este año es el suyo. Por él y por el lugar, el Castell de Bellver, que este verano ha abierto su programación al rock, mañana y servirá para que el cantante de Leaving Songs (Beggars Banquet, 06). «Estas canciones hablan de dejar cosas y el paso a una nueva vida, tanto musical como personal», explica Staples sobre el disco en las notas que lo acompañan. «Siempre he sido consciente de que estas canciones eran el final de algo, mi manera de cerrar el círculo que empecé a trazar hace mucho tiempo y del que debía salir. Aunque a la vez, mientras las escribía me dejaron vislumbrar un futuro que no esperaba».