Fue un auténtico luchador y eso nadie se lo podrá negar y, además, estaba contento. Acababa de presentar con Al Mayurqa, Temps de revolta, y compartía esa satisfacción con quienes le conocían. El fallecimiento del compositor y cantante mallorquín Antoni Roig Sierra (Palma, 1946) sorprendió ayer a todos y conmocionó al mundo de la cultura mallorquina, ésa que él tanto defendió, abanderó y amó.
El músico falleció en Palma, a los 61 años, después de una complicación de los problemas respiratorios que padecía desde hace un tiempo. Dos días antes, el pasado viernes, llenaba el Teatre de Lloseta en la presentación del álbum Temps de revolta con el resto de los componentes de Al Mayurqa, grupo con el que publicó hasta ocho disco y que fundó en 1994 con la intención de «dignificar la música tradicional mallorquina», como reconocía Roig cuando hacía referencia a la filosofía del grupo.
Compañeros y amigos despertaban ayer con la trágica noticia de la pérdida del músico y activista cultural. El intérprete Biel Mayoral, colaborador del último trabajo, expresó su tristeza. «Toni Roig era un personaje muy entrañable, era un vitalista, y vitalistas, en esta tierra, siempre nos harán falta», reconocía Mayoral, quien añadió: «Era una pieza clave por su labor de transmisión de sentimientos y de lucha». Palabras también de duelo, por parte del músico Joan Bibiloni. «Toni era una persona singular, era un conocedor de la música de la tierra y lo ha aplicado, con mucha honra, como una forma de vida, y en eso le envidio», reconoció Bibiloni. El compositor Tomeu Penya lamentó ayer profundamente el fallecimiento del fundador de Al Mayurqa, a quien definió como «un referente para nuestra generación». Por su parte, Miquel Brunet, de Ona Digital, aseguró que «Toni fue un luchador y sólo tengo buenas palabras para él, porque era uno de mis mejores amigos».
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