Desde el clásico TBO, pasando por otros atractivos para coleccionistas y nostálgicos como Capitán Trueno, Hazañas bélicas o El Jabato, o los más tradicionales para el público infantil como Mortadelo y Filemón, Zipi y Zape o Pulgarcito. La oferta de la Fireta del llibre i tebeos vells de Palma sigue siendo en su diecisiete edición amplia y para todos los públicos. En ella, el manga está siendo, cada vez más, uno de los grandes reclamos con títulos como Naruto, One Piece o Bobobo.
El Pati de La Misericòrdia acogió ayer este encuentro multitudinario. Las hasta 5.270 personas que pasaron por la feria en sus cinco horas de duración constantan un rotundo éxito. «Nuestro récord había rondado las 4.000 personas y estamos muy orgullosos del aumento de este año», reconoció Joan Miquel Morey, de la Associació d'Amics i Víctimes del Còmic, quien atribuyó los buenos resultados a los actos paralelos a la feria. Y es que durante el encuentro se pudo visitar la exposición Historietes, el còmic a les Illes Balears, con las explicaciones de Florentino Flórez. Un repaso a la historia del cómic narrada a partir de las obras de los dibujantes de las Islas. Desde los más conocidos como Max, Pere Joan, Tatum, Àlex Fito, Rafel Vaquer hasta los que tratan de abrirse un hueco y darse a conocer como Bartolo Torres, Guillem March, Jaume Balaguer, entre otros. «Uno de los grandes descubrimientos de la muestra es la obra de Jaume Ramis, que ya no está entre nosotros, y que hizo unos dibujos potentísimos», explicó Florentino Flórez.
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