Noventa millas es la distancia que separa las costas de Estados Unidos de las de Cuba. También es el título del último trabajo discográfico que la cantante cubana Gloria Estefan presentó, junto a sus más sonados éxitos, en el concierto que ofreció anoche en el recinto El Molino, en Calvià.
Ambientazo y miles de seguidores resumen los minutos previos al inicio del espectáculo, que empezó a la hora prevista. Al aire libre, tres grandes pantallas retransmitiendo lo que sucedía en el escenario. Gloria Estefan se presentaba ante sus seguidores vestida de un intenso rojo y acompañada por la Miami Sound Machine, la banda con la que se inició en el mundo de la música.
Considerada por casi todos como la reina de la música latina (sus ventas de discos y los numerosos premios que le han sido otorgados) en Estados Unidos, Gloria Estefan fue desgranando sobre el escenario algunos de sus temas más clásicos. Público entregado a sus ritmos y banderas cubanas para recibir a la diva en la que será su última gira.
Gloria Estefan se ha convertido en un auténtico ídolo de masas y sabe ganarse a su público. El concierto arrancó con la interpretación de varios temas, pero la cubana se tomó un respiro para hablar con sus seguidores, entre ellos, muchos de su tierra.
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