La representación plástica concebida como arteterapia es un proceso de construcción del pensamiento que, a veces, ayuda a superar conflictos emocionales. La pintora, fotógrafa y psicóloga Aina Pastor ha querido aplicar esta técnica a sus propios miedos y fruto de esta experiencia ha creado Rebirthing, una muestra donde los lienzos son la base para «los recuerdos que llevamos en el subconsciente».
Después de exponer en la Feria de Arte Contemporáneo de Suiza, la artista exhibirá sus telas en sa Posada de Moncaire, de Sóller, el próximo 20 de diciembre. Serán una treintena de piezas, «de pequeño y gran formato», donde Pastor, mediante la técnica mixta o la transferencia fotográfica, representa órganos vitales del cuerpo como el corazón o la columna vertebral y que forman parte de la interpretación que hace sobre el proceso del embarazo. En estas telas, la pintora recoge «el origen de la energía y de la materia que se genera», señaló. Y lo hace a través de «un juego cromático de colores primarios fuertes con la intención de crear vibraciones».
La mayoría de los colores son planos, por eso Pastor ha creado texturas con arenas y sin crear volúmenes. Las obras, con títulos como Feto, Part, Vull sortí o Vagina, muestran una historia personal cargada de sentido, que no pasará desapercibida. Para Pastor esta es una exposición que ha fluido sola y que significa el comienzo para seguir analizando «las diferentes etapas de la vida», ya que, según ella, «el arte nos ayuda a cuestionar muchos pensamientos y nuestra manera de ser».
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