Carme Riera, Bàbara Galmés, Monserrat Casas, Elena Díaz y Maria Payeras. g Foto: SERGE CASES

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CELIA HEREDIA Los poemas de Francisco Brines sonaron ayer para clausurar la primera jornada de un «sueño machadiano de libertad a través de la literatura y la cultura». Se cumplen cincuenta años desde que ocho poetas se reunieran en Collioure (Francia) para rendir homenaje en el lugar donde el poeta Antonio Machado fue enterrado tras marchar al exilio. Desde ayer y hasta mañana, Palma se convierte en escenario para la memoria de lo que allí ocurrió con la celebración del Congreso Internacional 1959, de Collioure a Formentor, en CaixaFòrum.

«Los poetas e intelectuales que allí se reunieron hace cincuenta años eran unos chicos inocentes y revoltosos que allí pudieron tener sus primeros contactos con los exiliados. Así recordaba Asunción Carandell, viuda de Goytisolo, a Blas de Otero, Gil de Biedma o Caballero Bonald, durante la mesa redonda Testimonios del homenaje en Collioure. La viuda del poeta catalán estuvo acompañada por Yvonne Hortet, viuda de Carlos Barral, y Jose Maria Castellet, este último el encargado de impartir la conferencia inaugural del congreso. Su intervención fue clave para conocer cómo se gestó esta reunión en Collioure, a la que, además de la Generación de los 50, asistieron otros poetas e intelectuales de Madrid, Barcelona y París, todos ellos congregados después de recibir «una carta enviada el 1 de febrero de 1959 por el Instituto de Estudios Hispánicos de La Sorbona», señaló Castellet, quien recordó que la carta estaba firmada por una veintena de intelectuales, como Pablo Picasso, Tristan Tzara, Jean Paul Sartre o Louis Aragon.

«Collioure mallorquín»
La primera jornada dedicada al homenaje a Colliuore fue un éxito de público. En ella, Carme Riera, directora del evento junto a Maria Payeras, afirmó que «Collioure fue mallorquín». La escritora y catedrática de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) se remontó así al momento en el que el municipio francés perteneció al Regne de Mallorca, «un lugar cerca de España, donde Machado fue enterrado, junto a su madre, rodeado de personas que alguna vez hablaron mallorquín».

El encuentro, organizado por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC), es un proyecto de la UIB y la UAB en el que hoy se hablará de la importancia de otros dos acontecimientos fundamentales para la literatura y de los que también se celebra su 50 aniversario. Las Conversaciones Poéticas de Formentor, de 1959, organizadas por Papeles de Son Armadans y Camilo José Cela, y el Coloquio Internacional de Novela, auspiciado por Carlos Barral "figura capital, junto a Cela, para la dinamización cultural internacional durante la posguerra", centrarán unas jornadas que comenzarán a las 09.30 horas con la mesa redonda Testimonios de las Conversaciones poéticas de Formentor.