Imagen de la entrada principal del cuartel de Son Tous, cerrado en 2007.

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ANA LARGO

Los investigadores deberán, finalmente, trasladarse hasta el antiguo acuartelamiento de Son Tous, situado entre las carreteras de Sineu e Inca, para acceder a los protocolos notariales que se encuentran en el Arxiu del Regne de Mallorca mientras el edificio de la Casa de Cultura se encuentre en obras.

Después de varios meses barajando distintas posibilidades, se descartó, en la última reunión, que el Centre de Història i Cultura Militar de Balears, sito en el Claustre de Santa Margalida de Palma, acogiera esta parte del archivo, la más consultada por los investigadores. Según ha podido saber Ultima Hora, el objetivo final de esta decisión de trasladar temporalmente el conjunto del archivo a esta base militar, cerrada en 2007, es contener gastos en un momento en el que el Govern balear trabaja en el recorte de presupuestos de diferentes Conselleries.

En este caso, el ahorro se aproximaría, según apuntaron fuentes consultadas, a unos 30.000 euros. Además, se salvaría así el hecho de tener que adecuar dos espacios diferentes.

La sede provisional de Son Tous es, desde hace meses, la opción que, al parecer, más se adapta a las necesidades del Arxiu del Regne de Mallorca. El director del centro, Ricard Urgell, detalló hace un mes algunas de sus características, destacando el gran espacio bunkerizado donde se protegían la pólvora y las armas, que asegurará la conservación del fondo documental de humedades. Cabe recordar también que, aprovechando la gran cantidad de oficinas del cuartel, hasta él también se trasladarán las salas de investigadores, los talleres de restauración y digitalización, la administración y la zona de los facultativos que se encargan de la descripción de fondos.

Además, se reutilizará toda la infraestructura disponible en la Casa de Cultura de Palma, como las estanterías, los sistemas de seguridad o los últimos materiales adquiridos.

La obra de rehabilitación del Arxiu del Regne de Mallorca está previsto que comience, según anunció recientemente la consellera de Cultura, Bàrbara Galmés, a finales de este año o a principios de 2010. Tomada ya la decisión sobre el emplazamiento temporal y teniendo en cuenta las previsiones marcadas por la Conselleria de Cultura, el traslado del material debería ser inminente.