Un instante del rodaje de ‘Eixam’ con las protagonistas, Maria Morera y Zoe Bonafonte. | Aina Costa

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«Todos sentimos miedo», detalla la mallorquina Eugenia Sampedro al hablar de Eixam, su nuevo cortometraje tras Un diumenge qualsevol. Sampedro rodó el proyecto el pasado mes de diciembre en Esporles con las actrices Zoe Bonafonte, nominada este mismo 2025 por su trabajo en El 47, Maria Morera, conocida por su labor en La vida sense la Sara Amat y Libertad, por la que se alzó con el Premi Gaudí.

Eixam trata de dos amigas, interpretadas por las actrices antes mencionadas, que viajan a Mallorca para contemplar el eclipse solar que tendrá lugar el año próximo. Ya en la Isla, el miedo a que algo les pase, especialmente relacionado con la presencia de ciertos personajes masculinos, será el tono central del cortometraje. Es por ello que Sampedro habla del miedo como un sentimiento universal, pero concretado en el que las mujeres sienten.

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La directora mallorquina Eugenia Sampedro. FOTO: Jaume Morey

La idea misma del cortometraje nace a raíz de una serie de noticias que hablaban de pinchazos químicos que sufrían algunas mujeres y que las dejaban aturdidas, pero que no dejaban rastro. Ante ello, Sampedro se interesó por esta realidad y quiso hablar de ello «ya que se puede debatir si ha habido o no pinchazo, pero el miedo a que te pinchen no es debatible», destaca la cineasta. No obstante, advierte Sampedro: «Aunque el tipo de violencia fuera distinta, este corto existiría igual».

Y es que la mallorquina defiende la necesidad de seguir hablando de estas temáticas porque «siguen pasando a diario» y, de hecho, considera que «es más difícil hablar de ello porque la gente las ve como caducadas». Se muestra clara Sampedro quien confiesa que, aunque el tono es hablar del miedo como algo universal, «en este caso son dos chicas porque tienen que serlo, ya que las estadísticas están ahí y contar esto donde los protagonistas fueran hombres hubiera sido ridículo».

No obstante, su interés ha sido «enfocarlo desde algo tan común como es el miedo», algo con lo que todo el mundo se puede sentir identificado, y que han tratado de plasmar a nivel formal «a través de planos cerrados», centrándose en los ojos de las actrices, en los sonidos y en la simbología de las picaduras de las abejas así como en un entorno, Esporles, que es «bastante terrorífico» al estar rodeado de montañas, comenta la directora.

Por otro lado, también expresa Sampedro lo «fácil» que se lo han puesto desde el equipo técnico y actoral, con Bonafonte y Morera. Además, el apoyo financiero de IB3, el ICIB, el IEB y el Consell le ha permitido «pensar a lo grande», y la producción de CEF Produccions.

En líneas generales, Sampedro considera que ha dado un paso adelante tras su anterior cortometraje, Un diumenge qualsevol, y ahora tocará darle el punto definitivo a través de la banda sonora, para la cual está en búsqueda activa de compositora, además del montaje y el color, que correrán a cargo del también director de cine mallorquín Jaume Carrió.