Se acerca la vuelta al cole, y no tan solo para los más pequeños. Si una cosa es importante en cualquier trabajo es la adaptación y la formación continua. Internet nos permite mantenernos siempre al día, aprendiendo a nuestro ritmo y sin barreras geográficas.
Mooc es el acrónimo en inglés de Massive Online Open Courses (o Cursos Online Masivos y Abiertos) y es resultado de la evolución de la formación en internet. Un paso previo y nada despreciable fue la plataforma Moodle.
Los moocs llevan en marcha desde el año 2008, cuando George Siemens y Stephen Downes crearon su primer mooc, un curso sobre inteligencia artificial que se impartía desde Standford y al que por sorpresa para ellos se incribieron más de 160.000 alumnos de todo el mundo.
¿Te imaginas por ejemplo aprender economía, tecnología o empresa haciendo un curso de Standford, Harvard u Oxford? Es posible.
Dos de las plataformas más conocidas son Coursera y Udemy, que además de permitirte que te inscribas y comiences a aprender, también te permiten poder enseñar a través de su web.
Coursera cuenta ya con más de 14 millones de alumnos y con 120 universidades asociadas y Udemy con más de 8 millones de alumnos y más de 18.000 profesores.
En España, Crypt4you fue la primera iniciativa de mooc en español. Dirigido por los doctores Jorge Ramió y Alfonso Muñoz, se trataba de un curso de criptografía con el apoyo de la Universidad Politécnica de Madrid.
Los beneficios de este tipo de formación son los siguientes:
- La flexibilidad horaria y geográfica.
- Tener compañeros de diferentes edades con los que puedes interactuar.
- Aprender mediante vídeos y actividades de evaluación, a tu ritmo.
- Conseguir certificados al terminar el curso.
- Las acciones formativas son directas y breves.
Ahora solo queda, entrar, seleccionar el curso que más os guste y sobre todo, terminarlo, ya que la tasa de abandono supera el 80%.
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