Renting para páginas web

Empezaron con 23 años en su garaje, “como auténticos emprendedores”, y poco a poco siguieron trabajando hasta formar su empresa actual, con dos trabajadores externos.

Además de confeccionar portales a medida, ofrecen un servicio de renting de páginas web, su apuesta personal para contribuir a democratizar internet. “Lo importante hoy en día es tener una web moderna y adaptada al móvil, y nosotros lo ofrecemos por una cuota mensual pequeña para que todo el mundo que quiera pueda tener presencia en internet”, explica Fornés. “Y si existe el renting para coches, ¿por qué no hacerlo también para páginas web?”, se preguntaron hace años. De ahí nació su producto estrella.

La diferencia de su apuesta es que no cobran por crear una página web, sino por el servicio, lo que se llama renting o alquiler: por hacerla y tenerla actualizada, aunque el cliente no obtiene la propiedad. “Orientamos nuestro producto a pymes, emprendedores y startups con bajo presupuesto. Es más, a lo mejor cerrarán en un año, por lo que así se ahorran dinero y problemas a cambio de una cuota mensual”, añaden.

“Las webs cada año se van devaluando por la velocidad a la que van las tecnologías. Puedo decir cuándo se hizo una web con solo mirarla, y tenemos que actualizamos constantemente para estar al día. Lo más importante es que desde este invierno, Google penaliza a las web que no están adaptadas para móviles y tabletas. Nosotros ofrecemos una web que sí lo está”, comenta Valero. “Ofrecemos un servicio a personas como mi padre, que quiere tener un blog pero no sabe abrir una cuenta, o a empresas que solo necesitan mostrar quiénes somos, qué ofrecemos y los datos de contacto”, añade Fornés.

En la actualidad, Google domina el mercado de buscadores, algo que ellos encuentran muy normal por diferentes motivos. “Son los mejores en posicionamiento y hacen las cosas bien. Muchos servicios son gratis, como el de analítica. Sin ellos, las páginas web costarían más, porque facilitan mucho el trabajo. Por eso tiene una cuota de mercado del 95%”, aseguran.

Valero y Martí trabajan en un segmento de mercado homogéneo y con mucha oferta. Aun así, no consideran la competencia un problema, sino todo lo contrario. “Nunca hemos tenido rivalidades con las otras empresas que ofrecen páginas web en Mallorca porque cada uno tiene su segmento de mercado. Cada empresa tiene su punto fuerte, el nuestro es el trato cercano con el cliente y que estamos dirigidos a particulares, startups, emprendedores y pymes. El único problema es el vecino del quinto, que hace webs como afición y ofrece un mal servicio”, cuenta Fornés.

EMPRENDIMIENTO. Martí Fornés y Alberto Valero son autónomos, y si hay algo de lo que se quejan es del poco apoyo que reciben los jóvenes que empiezan a trabajar por cuenta propia. “El emprendimiento ahora es un boom, y no es ningún juego. Tiene riesgos muy grandes. Nosotros estuvimos el primer año en la Incubadora del Parc Bit, que estuvo muy bien porque por 15 euros teníamos una mesa. Pero aparte de esto, no hay muchas ayudas. Para nosotros lo peor es la cuota de autónomo que nos mata, porque nos quita casi todo el margen de beneficios”, indica Fornés. “La principal crítica es que si un mes no facturas tienes que pagar igual que si facturas 10.000, lo que no tiene ningún sentido”, añade Valero.

En el futuro no se ven muy lejos de donde están actualmente. “Yo no soy muy ambicioso. No me veo creciendo a nivel exponencial. Llevamos cinco años, mejorando un poco cada año, y puede ser que añadamos un puesto de trabajo, pero seguiremos haciendo lo que hacemos”, comenta Valero. “Si crecemos mucho perderemos toda nuestra esencia, que es el trato cercano”, concluye Fornés.