La tensión generada por la detención de Abdalá Ocalan se extremó ayer tras la muerte de cuatro kurdos por disparos de agentes de Israel.

TW
0

Turquía rechazó ayer que el líder kurdo Abdalá Ocalan reciba asistencia legal extranjera durante un juicio que puede concluir con una condena a muerte y alejar aún más el sueño turco de aproximación a la Unión Europea (UE), según algunos expertos aunque Ankara ya ha asegurado que tendrá un juicio justo.

La policía turca impidió anoche la entrada en el país de tres abogados holandeses de Ocalan que pretendían colaborar con la defensa turca en el juicio, cuya fecha y lugar de celebración aún no se han fijado.

El primer ministro turco, Bulent Ecevit, mostró anoche su indignación por las presiones europeas para que el jefe guerrillero reciba un juicio justo.

«No podemos aceptar comportamientos que pongan en duda la independencia de nuestros tribunales (...). Ningún Estado europeo tiene derecho a darnos lecciones en ese sentido», dijo.

El primer ministro confirmó que el jefe del PKK ha sido encarcelado en una isla-prisión en el mar de Mármara, Imrali, de la que han sido evacuados el resto de los presos «para seguridad de Ocalan». El líder del Partido de los Trabajadores de Kurdistán advirtió, en una entrevista antes de su detención que ese grupo guerrillero kurdo turco planeaba reforzar su lucha armada con un alzamiento popular.

Eso no ha sido óbice para que la Comisión de Asuntos Exteriores en el Parlamento Europeo adoptará ayer una declaración en la que pide un juicio justo para Ocalan, en presencia de juristas de la Unión Europea en calidad de observadores, y que en ningún caso, se aplique la pena de muerte, prohibida por el convenio Europeo de Derechos Humanos del consejo de Europa, del que Turquía es signatario.

El líder kurdo afirma estar dispuesto a ayudar a Turquía
Los servicios de inteligencia turcos difundieron ayer las primeras imágenes y declaraciones del líder rebelde kurdo, Abdalá Ocalan, en las que, poco después de ser capturado, aseguraba estar dispuesto a ayudar a Turquía.

«Si se me brinda una oportunidad serviré a Turquía, amo a Turquía, mi madre es turca, amo a este país», dijo Ocalan, considerado enemigo «número uno» del país, en imágenes grabadas por los servicios de inteligencia en el avión en el que era trasladado desde Kenia hacia Turquía.