El corresponsal Andréi Babitski, detenido en Chechenia por las
tropas rusas y desaparecido tras un extraño «canje» con los
rebeldes, está vivo y se encuentra en manos de la policía rusa en
Daguestán, informó ayer la televisión independiente rusa NTV.
La esposa de Babitski, Liudmila, dijo a la cadena desde Praga
que Andréi le había llamado esta noche por teléfono desde la sede
del Ministerio de Interior de la república rusa de Daguestán. En
una breve conversación, Babitski sólo le dijo que desde su
desaparición en enero había permanecido «en territorio de
Chechenia», sin precisar si estuvo en manos de las fuerzas rusas o
de la guerrilla chechena, como afirmaba el Kremlin.
Babitski, corresponsal de guerra ruso de la emisora
estadounidense Radio Liberty, causó las iras del Kremlin con sus
reportajes sobre las elevadas bajas entre los soldados rusos en
Chechenia, ocultadas por el mando militar, y sobre las numerosas
víctimas civiles de los bombardeos sobre Grozni.
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