Los familiares de las víctimas de la época de la dictadura mostraron su satisfacción.

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EFE - SANTIAGO DE CHILE La decisión de juez Guzmán de ordenar el procedimiento y arresto domiciliario de Pinochet fue acogida con gran júbilo por los familiares de las víctimas y profundo pesimismo por lo seguidores del senador vitalicio y de forma cautelar por la gubernamental.

El fallo del magistrado de la Corte de Apelaciones fue anticipado de manera extraoficial por los abogados querellantes. A primera hora de la tarde de ayer el fallo fue oficializado y notificado a las partes. Pinochet, de 85 años, fue acusado de la autoría de 57 homicidios y 18 secuestros calificados atribuidos a la comitiva militar encabezada por el general Sergio Arellano Stark, que semanas después del golpe de Estado de 1973 ejecutó extrajudicialmente a 75 presos políticos.

El juez Juan Guzmán, instructor de 215 querellas presentadas contra Pinochet, adoptó la decisión tras someterle a exámenes médicos e interrogarle la semana pasada en relación con el «caso Caravana de la Muerte». Esta es la segunda ocasión en que este juez de la Corte de Apelaciones de Santiago dicta auto de procesamiento contra el ex comandante en jefe del Ejército. La primera fue el pasado 1 de diciembre, pero la Corte Suprema revocó el auto debido a que Guzmán no le había tomado la declaración indagatoria.

Pinochet, que salió el pasado sábado del Hospital Militar de Santiago, conoció la noticia en su residencia de descanso de Los Boldos, situada a 130 kilómetros al suroeste de Santiago, donde hoy recibió la visita de algunos amigos. Según los trascendidos extraoficiales, el juez Guzmán desestimó el sobreseimiento de la causa solicitado por la defensa de Pinochet, que argumentaba que la salud de su defendido le impide afrontar un juicio.

Por otra parte la diputada Isabel Allende, hija del ex presidente chileno Salvador Allende, expresó su alegría por el fallo extraoficial del juez Juan Guzmán Tapia, y dijo que «es muy importante que los chilenos demostremos al mundo que por muy poderosa que haya sido una persona como Pinochet, tendrá que enfrentarse a la justicia». Allende conoció el fallo en el Palacio de la Moneda y dijo que «este es un día histórico para nuestro país».