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EFE/JERUSALÉN El primer ministro israelí, Ariel Sharon, convocó, al concluir la jornada del descanso sabático, a los miembros del Gabinete de Seguridad para decidir si sigue en pie el alto el fuego pactado con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yaser Arafat. Fuentes del Gobierno de Sharón, «entre cuyos ministros cunde la indignación porque Arafat no cumple con el alto el fuego». Tres palestinos murieron y unos 120 resultaron heridos hoy en distintos incidentes con fuerzas israelíes en Gaza y Cisjordania coincidiendo con el primer aniversario de la «Intifada de Al Aksa», una jornada en la que los palestinos salieron a manifestarse a las calles.

Fuentes médicas palestinas informaron de que hoy se registraron unos 120 heridos, la mayoría de bala, sólo en la franja de Gaza, donde los soldados israelíes abrieron fuego contra jóvenes y adolescentes que les tiraban piedras en los principales cruces cercanos a los asentamientos judíos. Las fuentes dijeron que los heridos fueron tiroteados en la cabeza, las piernas, los brazos, el pecho y otras partes del cuerpo. Al cumplirse un año de este segundo levantamiento contra la ocupación israelí, que estalló el 29 de septiembre de 2000, un día después de que el Ariel Sharon visitara la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, se reanudaron desde ayer las manifestaciones de jóvenes y niños palestinos para tirar piedras a los soldados, cosa que no ocurría desde los primeros meses de la Intifada.

Los palestinos acusaron ayer a Israel de «violar el alto el fuego» pactado el pasado miércoles tras los enfrentamientos que se saldaron con un muerto y casi 80 heridos palestinos en la franja de Gaza. «Acusamos a Israel y al Gobierno israelí de violar el alto el fuego», declaró Nabil Abou Roudeina, principal consejero del presidente palestino, Yasir Arafat. «Pedimos a la comunidad internacional y especialmente a EE UU que intervengan inmediatamente para acabar con la agresión israelí».