El aparato siniestrado era un Tupolev 154 que se dirigía a Siberia.

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EUROPA PRESS - JERUSALÉN/MOSCÚ La Autoridad de Aeropuertos Israelíes suspendió durante unas horas todos los vuelos internacionales que habían de despegar o aterrizar en el aeropuerto de Ben Gurion Tel Aviv, cuyo tráfico aéreo ya ha sido reanudado, después de que un Tupolev 154 con destino a Novosibirsk se estrellara misteriosamente a la altura del mar Negro. 51 de los 66 pasajeros del avión eran ciudadanos israelíes, lo que causó una fuerte conmoción en el país.

Según el portavoz del ministro de Transportes, Efraín Sneh, las causas del accidente siguen siendo una incógnita. Después de que Rusia barajara inicialmente la tesis del atentado, el ministro ucraniano de Defensa desmintió que la causa del accidente se debiera a un misil tierra-aire de la Flota ucraniana en el mar Negro disparado en unas maniobras, tal como habían informado previamente fuentes occidentales y militares rusas. «Todos los misiles utilizados durante las maniobras tenían mecanismos de autodestrucción en caso de pérdida de control», afirmó el ministro. «Ni la dirección de los disparos, ni su distancia coinciden con el lugar donde estalló el aparato», añadió el portavoz del ministro ucraniano de Defensa.

Con una caída de una altura de unos 9.000 metros, el avión hizo impacto con las aguas del mar Negro, y en el lugar donde la profundidad alcanza más de un kilómetro se aprecian manchas de aceite y manchas de color rojizo, junto a trozos del avión estrellado y enseres de los viajeros.

Un helicóptero Mi-8 y un avión An-12 de las fuerzas armadas del Ejercito ruso continúan rastreando la zona, pero se teme que sea imposible la localización de la 'caja negra' debido a la profundidad, y a la posible desaparición de la misma por el efecto de la explosión. Según el jefe de control del espacio aéreo de la zona sur de Rusia, la desaparición del avión en el radar de control se produjo sobre las 11.40 horas españolas. Al poco tiempo, recibió información del piloto de un avión armenio AN-24 que volaba en las proximidades del avión desaparecido y que indicaba que había apreciado una primera explosión del avión TU-154 en el aire, y otra explosión, más tarde, cuando el avión siniestrado ya se precipitaba directamente hacia el fondo del mar.